CARACAS, 2 Nov. (Notimérica) -

   En los últimos días, la crisis política de Venezuela ha entrado en una nueva etapa marcada, aparentemente, por el diálogo.

   El Gobierno y la oposición, representada por el bloque de la Mesa de Unidad Democrática (MUD) han logrado sentarse a hablar con el fin de "definir los elementos que contribuirán a la realización de un eventual diálogo".

   En un comunicado publicado por la MUD tras el encuentro, la coalición opositora aseguró que se compromete a "exigir el fin de la represión contra demócratas y el pueblo", así como "retirarse del diálogo si no son resueltas las demandas a corto plazo".

   Por el momento, las partes acordaron en su primera reunión la formación de cuatro mesas de trabajo: paz y Estado de Derecho, reparación a las víctimas, cronograma electoral y economía.

   Según lo establecido, cada una de las mesas estará coordinada por uno de los compañeros internacionales del diálogo. Así, el expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero será el encargado de la mesa de Paz, Respeto al Estado de Derecho y a la Soberanía Nacional. Entretanto, la mesa de dedicada a Verdad, Justicia, Derechos Humanos, Reparación de las Víctimas y Reconciliación estará a cargo de la Santa Sede; la mesa temática de lo Económico-Social estará coordinada por el exmandatario dominicano Leonel Fernández y la cuarta, para la Generación de Confianza y Cronograma Electoral, por el expresidente panameño Martín Torrijos.

   Asimismo, este acuerdo alcanzado incluye expresamente cuestiones polémicas como la revisión de la situación de las personas encarceladas y el análisis del funcionamiento y la autonomía de los poderes públicos.

   Además, recoge un compromiso para "mejorar las condiciones de abastecimiento de alimentos y medicinas" y explorar alternativas que conlleven la acción conjunta de los órganos del Estado para atender los temas económicos más urgentes". Igualmente, Gobierno y oposición se comprometen a "disminuir el tono de agresividad del lenguaje utilizado en el debate político".

CONSECUENCIAS DEL DIÁLOGO

   Esta supuesta distensión del conflicto ya ha tenido sus frutos en ambas partes. El presidente del país, Nicolás Maduro, anunció este lunes la liberación de cinco opositores, calificados como presos políticos. Se trata de Andrés Moreno, Marco Trejo, Carlos Melo, Andrés León y Caramoto Rodríguez.

   En segundo lugar, otra de las consecuencias del inicio de las conversaciones ha sido la suspensión por parte de la MUD de la marcha convocada para este jueves hacia el Palacio de Miraflores --sede del Gobierno venezolano-- para exigir la celebración del referéndum revocatorio contra el presidente.

   En la misma línea, la coalición opositora ha decidido posponer hasta el próximo martes la comparecencia de Maduro ante la Asamblea Nacional parra dirimir su responsabilidad política, que estaba prevista para este 1 de noviembre. "Si el Vaticano exigió que se sienten en una misma mesa, hay que hacerlo, no podemos negar esa posibilidad", esgrimió al respecto el presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup.

LA 'CARA B'

   No obstante, no todos han sido pasos en pos de la reconciliación. Esta semana, en su último programa de 'Contacto con Maduro', el mandatario calificó de "grupo terrorista" a Voluntad Popular, el partido de la oposición que lidera Leopoldo López, quien está preso desde 2014.

   A pesar de esto, Maduro aseguró que apoyará todas las decisiones que tome la Justicia sobre las "amenazas" de la organización. "Yo aspiro a que los tribunales tomen cartas en el asunto ante los llamamientos de este grupo que pretende utilizar la legalidad de Venezuela", apuntó el presidente venezolano.

   Ante esto, Voluntad Popular advirtió a Maduro de que sus "amenazas" no los doblegarán ni impedirán que continúen su defensa de la Constitución. "Con esto Maduro nos ratifica que en Voluntad Popular estamos del lado correcto de la historia al denunciar la falsa intención con la que el Gobierno asume el proceso de diálogo", declaró la formación.

   Por el momento, la comunidad internacional celebra con prudencia el inicio formal de las conversaciones, que se retomarán el próximo 11 de noviembre, según informó la MUD.