CARACAS/BOGOTÁ, 10 Jun. (Notimérica) -
El viaje a Venezuela del expresidente del Gobierno español, Felipe González, con la intención de asistir a la defensa de los líderes opositores Leopoldo López y Antonio Ledezma, no sólo ha agrandado las diferencias entre España y el país sudamericano, sino que también ha acrecentado la vieja enemistad del Gobierno de Nicolás Maduro con Colombia.
González llegó el domingo, 7 de junio, a Caracas, y entró al país sin mayores problemas a pesar de que en abril, el Parlamento venezolano le declaró persona non grata a propuesta del Partido Comunista, que forma parte de la coalición que apoya al chavismo.
Una vez en Venezuela, inició los trámites para visitar a los dirigentes opositores venezolanos presos Leopoldo López y Daniel Ceballos, matizando que que participaría en su defensa judicial no como abogado, sino como asesor técnico.
Sin embargo, González abandonó territorio venezolano en horas de la mañana de este martes, 9 de junio, rumbo a Bogotá (Colombia) tras no conseguir el permiso por parte del Gobierno de Maduro para visitar a los presos políticos Daniel Ceballos y Leopoldo López.
Además, las autoridades nacionales negaron la posibilidad de que González asistiera a la audiencia de López, prevista para este miércoles, según ha informado la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que ha mostrado en Twitter una fotografía de Felipez González con Hugo Chávez para criticar que ahora el chavismo considere ahora "malo" al ex presidente español.
El ex jefe del gobierno español se trasladó desde Caracas hasta Bogotá en un avión de la Fuerza Aérea Colombiana, lo que encrespó los ánimos del mandatario venezolano, Nicolás Maduro, quien pidió explicaciones al presidente de Colombia, Juan Manuel Santos.
El propio presidente de Colombia, confirmó el mismo martes por la tarde que autorizó el traslado del expresidente español desde Venezuela a la capital de Colombia, para reunirse posteriormente con él en el Palacio de Nariño.
Pero lejos de calmar los ánimos, la confirmación de Santos de que autorizó el traslado del expresidente español Felipe González a Bogotá, desde el aeropuerto de Maiquetía, en el avión Legacy de la FAC 1215, ha provocado que Venezuela haya decidido convocar al embajador de Colombia en Caracas para pedir explicaciones por la polémica salida del país del expresidente español.
"Yo espero explicaciones claras del Gobierno colombiano sobre esto de prestar el avión presidencial de Colombia a un seño que vino a desconocer las instituciones venezolanas, a apoyar a grupos extremistas que han querido derrocarme y han querido derrocar a la democracia venezolana", ha apostillado Maduro, quien también considera que González "ha quedado muy mal parado", porque su salida del país "fue una huida".
CRÍTICAS DE BOLIVIA.
También el presidente de Bolivia, Evo Morales, se ha sumado a las críticas del Gobierno venezolano a la visita del expresidente español, que considera un ejemplo de "nuevo colonialismo" y se ha preguntado si "acaso los españoles no tienen problemas políticos".
"Si va un expresidente de Venezuela o Bolivia a enseñar a España no lo aceptarían", dijo el líder boliviano desde Bruselas, donde asiste a la cumbre entre la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados de América Latina y el Caribe (CELAC).
También esta cumbre se ve afectada por la situación en Venezuela y comienza este miércoles con marcadas diferencias entre las dos regiones respecto a la situación política en dicho país.