TEGUCIGALPA, 30 Nov. (EUROPA PRESS) -
El embajador de Estados Unidos en Honduras, Hugo Llorens, aseguró desconocer la autenticidad de los documentos divulgados por Wikileaks y criticó que el propósito de su publicación fue "dañar la relación" que Washington "tiene con sus mejores amigos, con sus mejores aliados".
"Yo no puedo comentar sobre la autenticidad del cable que se publicó", dijo Llorens en una entrevista a la emisora local HRN, en la que también acusó a los responsables de las publicaciones de ser gente "falta de ética, que busca dañar" a Estados Unidos.
El documento de Wikileaks da a conocer lo que habría sido la postura oficial de Washington tras el derrocamiento de Manuel Zelaya en 2009, según las versiones de Llorens, quien afirmó que "los militares, la Corte Suprema y el Congreso Nacional han conspirado el 28 de junio en lo que constituyó un golpe de Estado ilegal y anticonstitucional contra el poder Ejecutivo".
El diplomático afirmó que Estados Unidos "tiene gran preocupación" en que gente "sin escrúpulos" pueda "conseguir informes confidenciales del Gobierno de los Estados Unidos" y que esos informes puedan "salir a la luz".
Asimismo, dijo que no se sabía la autenticidad de los documentos ya que podían "haber sido alterados o fabricados" y que por ello se "crea una gran preocupación".
A pesar de estas revelaciones, Llorens aseveró que las relaciones con Honduras son buenas. "Nosotros estamos enfocados en una relación muy positiva con Honduras", subrayó.
Informó además de que este martes había hablado sobre este tema con el presidente, Porfirio Lobo, y la ministra de la presidencia, María Antonieta de Bográn. "Estuvimos de acuerdo que lo importante para los intereses de Estados Unidos y de Honduras" que es "trabajar juntos (...) en apoyar los esfuerzos del presidente Lobo y su Gobierno de fortalecer la institucionalidad democrática".
Señaló que estos intereses son fundamentales para ambos países, "lo que estas personas están tratando de hacer" es "dañar" a "Estados Unidos, y dañar a sus intereses diplomáticos por todo el mundo".
También sostuvo que estaba clara "la posición de Estados Unidos sobre lo ocurrido el 28 de junio". "Lo hemos repetido y reiterado innumerables ocasiones", dijo el diplomático, al aclarar que Washington "siempre estuvo al lado de restaurar el orden democrático" en Honduras.
"Hubo una elección libre en Honduras, una elección transparente donde el pueblo habló, eligió a un nuevo Gobierno, un nuevo congreso, Estados Unidos ha sostenido una relación muy estrecha con este gobierno democráticamente elegido por el pueblo", precisó.
COMPRENSIÓN
En este contexto, pidió comprender que en la actividad diplomática de cualquier país se requiere "discreción" y "confidencialidad" y precisamente esa protección es "esencial" para llevar a cabo cualquier trabajo diplomático.
"Ellos han tratado de dañar ese esfuerzo diplomático con un objetivo muy claro de dañar Estados Unidos y dañar las relaciones que Estados Unidos tiene con sus mejores amigos y aliados", afirmó.
También aseguró no haber escuchado las declaraciones de Zelaya sobre ese tema, acusando a Estados Unidos de tener una doble moral en la crisis, pero respondió que la política de su país en la misma "fue muy clara", y que la declaración de Zelaya le parecía "fuera de lugar y absurda".