La OCHA resalta que "cerca de 50.000 yemeníes viven ya en condiciones similares a la hambruna"
MADRID, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -
Naciones Unidas ha expresado este jueves su preocupación por el repunte de los combates desde mediados de enero en la provincia yemení de Hodeida (oeste) y ha alertado que durante los mismos han sido alcanzados edificios residenciales, lo que "pone en riesgo a miles de civiles".
"Los ataques indiscriminados contra áreas residenciales son una violación del Derecho Humanitaria y deben terminar inmediatamente", ha dicho el coordinador humanitario de la ONU en Yemen, Auke Lootsma, cuya oficina ha destacado que hay informaciones sobre víctimas civiles y el desplazamiento de al menos 700 personas en Hays y Al Duraihimi.
Así, Lootsma ha subrayado que "las partes deben recordar que tienen el deber de adoptar todas las medidas necesarias para proteger a los civiles en todo momento y para permitir que los trabajadores humanitarios den atención a los heridos y los desplazados.
Según las cifras que maneja la ONU, al menos ocho civiles han muerto o han resultado heridos desde el 20 de enero, la mayoría de ellos mujeres y niños. Los combates han continuado durante los últimos días en varias localidades situadas en el sur de la provincia, incluidas Al Duraihimi y Al Tuhayat.
"El conflicto sigue causando miseria a millones de vidas", ha lamentado Lootsma, quien ha incidido en que "un fin inmediato de las hostilidades es necesario con urgencia para permitir a los trabajadores humanitarios llevar a cabo una valoración de las necesidades, dar atención médica a los civiles heridos y apoyo material a los desplazados y los que han perdido su sustento".
Durante el último trimestre de 2020 se registraron 153 víctimas civiles en Hodeida a causa del conflicto, la cifra más alta en todo el país, con combates cerca de zonas residenciales, en un momento en el que la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) ha alertado del aumento del riesgo de hambruna en Yemen.
El organismo destacó el miércoles que "cerca de 50.000 yemeníes viven ya en condiciones similares a la hambruna, con cinco millones más a un paso de la misma" y agregó que los precios de los alimentos han aumentado un 150 por ciento respecto a la media antes del conflicto.
Esta situación, sumada a la depreciación del rial yemení, provoca que "la amenaza de la hambruna sea una realidad" para millones de personas. "Debemos hacer todo lo posible para evitar una hambruna a gran escala", dijo la OCHA, que pidió más financiación para hacer frente a la crisis.
El conflicto ha sufrido un recrudecimiento durante los últimos meses, pese a los esfuerzos internacionales de mediación, en una guerra que ha provocado la que es la mayor crisis humanitaria mundial. Actualmente, casi el 80 por ciento de la población, unos 24 millones de personas, necesitan ayuda.