MADRID, 27 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Yemen, Abd Rabbu Mansur Hadi, ha reiterado este sábado su orden de un alto el fuego en la provincia de Abiyán para facilitar las conversaciones de paz con los separatistas suryemeníes, a quienes ha acusado de frustrar cualquier esfuerzo de unidad a través de sus recientes ofensivas contra las fuerzas del Gobierno yemení.
El primer anuncio del alto el fuego, declarado este miércoles llegó tras varios días de combates entre las fuerzas leales a Hadi y las encabezadas por el Consejo de Transición del Sur (STC), el órgano político de los separatistas del sur de Yemen.
El pasado mes de agosto, las fuerzas del STC lanzaron una ofensiva que les llevó a hacerse con Adén, sede del Ejecutivo reconocido internacionalmente, si bien los separatistas y el Gobierno de Hadi lograron alcanzar una tregua que les emplazó a un frágil acuerdo de paz en noviembre, en el conocido como Acuerdo de Riad.
Sin embargo, el STC han denunciado que el Gobierno yemení ha incumplido los términos del acuerdo y procedieron en abril a proclamar su autogobierno en esta zona del país, incluida la ciudad de Adén.
Aunque los separatistas tienen una agenda enfrentada con la del Gobierno de Hadi, ambos intentaron hacer causa común y aceptaron formar parte de la coalición liderada por Arabia Saudí que intervino en marzo de 2015 contra los huthis, que controlan la capital, Saná, y otras zonas del país.
Este sábado, Hadi ha acusado a los separatistas de emprender una serie de "actos de escalada", comenzando por la declaración de una administración autoproclamada" en el sur del país, según ha declarado durante un discurso recogido por la agencia de noticias oficial Saba (paralela a la agencia del mismo nombre que controlan los rebeldes).
"Y el último de esos actos de escalada fue la rebelión contra el estado y el ataque contra los habitantes pacíficos de la provincia de Socotra, una isla amistosa que nunca ha disparado un solo tiro, jamás", ha declarado el presidente, en relación a la batalla librada la semana pasada con las fuerzas suryemeníes en este archipiélago, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
"Lo que es decepcionante y molesto es ver esos vehículos blindados y otros equipos militares fantasiosos que invaden las oficinas del gobierno e intimidan a los civiles desprevenidos en Socotra, cuando en realidad deberían estar en localidades como Aqabat Tahra, Alhosha o Serwah, en primera línea contra los huthis, donde está la verdadera guerra", ha añadido.