Actualizado 10/08/2009 07:53

Zelaya fustiga a EEUU, logra cobijo de Unasur

QUITO (Reuters/EP) - El depuesto presidente de Honduras, Manuel Zelaya, fustigó el domingo como "tibia" la reacción de Washington en contra del golpe de Estado que lo sacó del poder, el cual sí fue condenado enérgicamente por la Unasur que además llamó a la comunidad internacional a tomar nuevas medidas para la restauración del líder.

A su llegada a Ecuador para participar en la toma de posesión del presidente Rafael Correa, que coincide con una cumbre de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur), Zelaya también alabó a aquellos países que no han reconocido al Gobierno de facto que se instaló en Honduras desde el golpe del 28 de junio.

"Considero que Estados Unidos ha hecho esfuerzos, pero no son suficientes. El presidente Barack Obama deberá explicar por qué sus medidas son tibias con el golpe de Estado en Honduras", sostuvo Zelaya a su llegada a Quito, en la que recibió honores de jefe de Estado.

El derrocamiento de Zelaya, que fue sacado de su casa a punta de pistola y trasladado a Costa Rica por militares, fue condenado inicialmente por Washington, quien además suspendió parte de su ayuda a Honduras y visas a algunos líderes del Gobierno de facto, pero no lo ha calificado como un golpe de Estado.

Desde entonces, Zelaya ha intentado infructuosamente volver a su país y la mediación internacional para buscar una salida a la crisis política ha fracasado. Para el depuesto gobernante, Estados Unidos es clave en una solución por sus lazos comerciales con Honduras.

En sus declaraciones del domingo, Zelaya alabó la actitud de Ecuador debido a que "no reconoce ningún gobierno de facto que haga golpes de Estado en América Latina". Quito no reconoce a Roberto Micheletti, quien tomó el poder con el apoyo de los militares.

Los cancilleres de la Unasur ratificaron su condena al golpe de Estado en Honduras, así como las resoluciones y declaraciones emitidas por Naciones Unidas (ONU), la Organización de Estados Americanos (OEA), el Mercosur, la Comunidad Andina (CAN) y otras instancias internacionales.

En un comunicado, los cancilleres de la Unasur reafirmaron que no reconocerán "ninguna convocatoria a elecciones de parte del gobierno de facto", y respaldarán la misión del secretario general de la OEA y ministros de Relaciones Exteriores de varios países sudamericanos.

En el documento, convocaron "a la comunidad internacional a extremar los recursos necesarios y adoptar nuevas medidas para asegurar el restablecimiento del Presidente José Manuel Zelaya en el ejercicio pleno de sus funciones y la restauración pacífica de la democracia en Honduras".