MADRID, 11 Feb. (EUROPA PRESS) -
El gobernador de Puerto Rico, Alejandro García Padilla, ha presentado este lunes seis medidas con las que espera poder hacer frente a la crisis fiscal y evitar la degradación del crédito de este Estado Libre Asociado por parte de las acreditadoras Standard & Poor's y Moody's.
En este sentido, García Padilla ha señalado que la isla "está lista para enderezar sus finanzas" y confía en salir "más fuerte que nunca de esta coyuntura". "Ha llegado la hora de pagar las cuentas de lo que otros tomaron y se fueron sin pagar", ha apostillado el primer ejecutivo, en declaraciones recogidas por el diario puertorriqueño 'El Vocero'.
El plan presentado prevé actuaciones en dos frentes diferentes: el fiscal, con el foco puesto en la reducción de los gastos del gobierno, mejora de la capacidad de recaudos y la obtención de liquidez; y en el económico, con el objetivo de continuar estimulando la inversión y el empleo, según ha explicado el gobernador.
En concreto, ha prometido un reducción de 170 millones de dólares (más de 124 millones de euros) en el gasto del año fiscal corriente, algo que pretende conseguir sin despedir empleados públicos. De la misma forma, ha manifestado la intención de reducir en, al menos, 800 millones de dólares (585 millones de euros) el gasto del Gobierno, para lo que se necesitarán "algunas medidas contundentes", ha sentenciado.
Asimismo, García Padilla ha adelantado que "se renegociarán los préstamos cuyos pagos se aceleran por la degradación" y "se continuará trabajando en alternativas de financiamiento". "No voy a tomar prestado para cuadrar el presupuesto. Esto no pasa en Puerto Rico desde hace muchos años", ha añadido.
Otro de los puntos principales de este plan son las medidas contra la evasión contributiva. "La justicia del sistema no puede permitir una carga mayor sobre el ciudadano honesto. El evasor no solo se burla del Gobierno, sino que agrede al puertorriqueño honesto. El Departamento de Justicia actuará de inmediato, con toda severidad sobre el tema", ha advertido.
En un mensaje transmitido por los medios estatales, el gobernador ha concluido que "podrán en cintura" a las corporaciones publicas, que deberán "asumir la responsabilidad por los resultados de sus operaciones". "No pueden pensar que el fondo general seguirá siendo el salvavidas de sus recursos", ha concluido.