Actualizado 11/07/2006 21:36

Afganistán.- La viuda y tres familiares del soldado fallecido se trasladan a Perú para enterrarlo en su ciudad natal


MADRID, 11 Jul. (EUROPA PRESS) -

El avión Boeing-707 del 47 Grupo Mixto de la Fuerza Aérea española que trasladó desde Afganistán hasta España el féretro con el cuerpo del soldado Jorge Arnaldo Hernández Seminario, fallecido el pasado sábado en la provincia afgana de Farah, partió este mediodía desde la Base Aérea de Torrejón con destino a la capital de Perú, Lima, según confirmaron a Europa Press fuentes de Defensa.

La aeronave del Ejército del Aire español traslada también a la viuda, Zaira Vilma Jiménez, que va a acompañada por tres familiares y por un grupo de la II Bandera de la Brigada Paracaidista (BRIPAC) --la unidad a la que pertenecía el soldado fallecido al ser alcanzado su vehículo blindado por la explosión de una mina anticarro--. La comitiva tiene previsto llegar en torno a las 20.00 horas (3.00 hora peninsular española de mañana, miércoles) a la capital peruana.

Desde Lima, la viuda y el féretro con el cuerpo del difunto se trasladarán por vía terrestre hasta la localidad de Chapica-Campana, donde nació Jorge Arnaldo Hernández Seminario y reside su familia. El cuerpo del caballero legionario paracaidista llegó anoche a la base madrileña de Torrejón y fue recibido por el ministro de Defensa, José Antonio Alonso, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y los jefes del Estado Mayor de la Defensa, general de Ejército Félix Sanz Roldán, y del Estado Mayor del Ejército de Tierra y del Ejército del Aire, general de Ejército Carlos Villar Turrau y general del Aire Francisco José García de la Vega, respectivamente.

Sus propios compañeros de filas de la Brigada Paracaidista llevaron a hombros su ataúd cubierto con la bandera española desde el avión hasta el coche fúnebre. Esta mañana, el presidente del Gobierno, presidió en la Base Almogávares VI, la sede de la II Bandera de la BRIPAC, en Alcalá de Henares (Madrid) el funeral oficiado por el arzobispo general castrense.

El soldado fallecido recibió en la base militar madrileña el último adiós de la cúpula militar y de sus compañeros de unidad y el jefe del Gobierno entregó su viuda la bandera española, la boina verde que portó en acto de servicio y la Cruz al Mérito Militar con distintivo amarillo que le impuso a título póstumo.