Publicado 11/11/2020 14:17

La apertura de presas hidroeléctricas agrava los impactos del huracán Eta en Guatemala, según Alianza por la Solidaridad

   MADRID, 11 Nov. (EUROPA PRESS) -

   La reapertura de las presas hidroléctricas, sin previo aviso, ha agravado los impactos provocado por el paso del huracán Eta en la población de Guatemala, que se ha cobrado al menos 150 víctimas mortales y cuantiosas pérdidas económicas, según denuncia la ONG Alianza por la Solidaridad, que denuncia que la apertura de las presas Renace y Oxec está tras este agravamiento de la catástrofe para las familias indígenas 'q'eqchíes'.

   La ONG reclama el envío inmediato de ayuda internacional a la zona, donde aún se busca a personas desaparecidas tras fallecer al menos 150 personas a consecuencia del huracán.

   En el territorio de Alta Verapaz, donde el 80 por ciento de su población es indígena, al menos 7.000 personas y más de 3.000 hectáreas han resultado afectadas, en el entorno de los ríos Cahabón y Oxec, que se han desbordado y se han agravado por la existencia de siete instalaciones hidroeléctricas en su cauce que, tras acaparar el agua, se vieron obligadas a soltarla, sin previo aviso a las comunidades, inundando y destruyendo decenas de aldeas y miles de hectáreas de campos de cultivo.

   La ONG denuncia además que la etina Q'ueqch está sufriendo el doble, primero por los efectos del huracán Eta y, segundo, por el abandono de las autoridades, ya que hasta el momento es la población local la que está ayudando hasta que empiece a llegar algún apoyo externo.

   Los primeros envíos internacionales están llegando desde El Salvador, México o Venezuela, pero aún así miles de familias que se han quedado sin viviendas y sin bienes, están malviviendo desde el pasado día 6 de noviembre en condiciones críticas.

   "Soltaron el agua de que retenían siete hidroeléctricas y afectaron a las comunidades. Nosotros veníamos reclamando que liberen los sagrados ríos y ahora ocurre esto. Mi hermano Bernardo Caal está preso en la cárcel por denunciar que las hidroeléctricas eran un desastre para estos ríos. Ahora ya es visible la destrucción que nos han traído de nuestras casas, nuestros cultivos de cardamomo están destrozados. Aquí no hay víctimas mortales, que sepamos, pero las pérdidas son terribles", denuncia una de las afectadas, María Caal.

   Algunos habitantes de la zona aseguran que los daños causdos por Eta en el departamento de Alta Verapaz son mayores que cuando pasó por Centroamérica el destructivo huracán Mitch, en octubre de 1998, pero entonces no había hidroeléctricas sobre sus ríos.

   La ONG recuerda que la hidroeléctrica OXEC fue denunciada por el líder y defensor de derechos humanos Bernardo Caal y la hidroeléctrica RENACE -construida en varias fases por la empresa española Grupo Cobra-ACS para una compañía guatemalteca- fue denunciada por la defensora Ana Rutilia Ical, en ambos casos porque no se había realizado la pertinente consulta a los pueblos indígenas afectados por las obras, como indica la normativa internacional (convenio 169 de la OIT).

   En el caso de RENACE, Alianza por la Solidaridad asegura que la empresa este martes solo había puesto a disposición de las autoridades algunos medios de transporte para llevar a comunidades accesibles ayuda humanitaria recogida entre la población de áreas menos afectadas.

   De momento, según fuentes oficiales, al menos han muerto 150 personas en San Cristóbal de Verapaz, una aldea que prácticamente ha desaparecido y donde aún se busca a numerosas personas, por lo que la cifra de fallecidos podría aumentar.

   Por ello, Alianza por la Solidaridad-ActionAid pide el envío urgente de ayuda internacional a las zonas más afectadas de Guatelama, a donde ya se acerca un nuevo huracán que podría repetir los efectos de Eta.