BUENOS AIRES, 7 May. (Del corresponsal de EUROPA PRESS Rafael Saralegui) -
La ministra de Defensa, Nilda Garré, dijo hoy que no está "ante una inminente catástrofe" en el espacio aéreo y aseguró que las condiciones de seguridad son adecuadas en la ciudad de Buenos Aires, donde se encuentran los dos principales aeropuertos del país.
La semana pasada, la Federación Internacional de Asociaciones de Pilotos de Líneas Aéreas (IFALPA) recomendó a sus asociaciones que extremaran "las medidas de vigilancia y precaución" en Argentina ante las deficientes condiciones de la seguridad en el espacio aéreo.
En rueda de prensa, Garré dijo que los principales organismos internacionales que controlan la seguridad del transporte aéreo, entre los que mencionó a la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) y la International Air Transport Association (IATA), dijeron que las condiciones de seguridad son adecuadas.
Garré dijo que es "inminente" la llegada de un radar secundario, en condición de préstamo del Gobierno español, para reemplazar al dañado del aeropuerto de Ezeiza y ratificó que antes de fin de año se incorporarán otros cuatro radares a los cinco existentes.
El 1 de marzo pasado un rayo saco de funcionamiento al radar del aeropuerto de Ezeiza, donde se concentran los vuelos internacionales, y que también es utilizado por los operadores del aeroparque Jorge Newbery, donde se operan los vuelos domésticos.
El gremio de los controladores de vuelos aseguró que el radar secundario tiene reiterados fallos, por lo que el control de todos los vuelos se realiza desde entonces en forma manual, lo que ha generado retrasos en las partidas y llegadas.