SINGAPUR (Reuters/EP) - La cantidad de carbono almacenada en territorios congelados en el lejano hemisferio norte está doblando previas estimaciones y un rápido derretimiento podría acelerar el calentamiento global, indicó un estudio publicado el miércoles.
Amplias áreas del norte de Rusia, Canadá, países nórdicos y del estado estadounidense de Alaska poseen profundas capas de territorio congelado cerca de la superficie llamado permahielo.
El rápido calentamiento ya ha causado un acelerado derretimiento del permahielo en algunas áreas, liberando dióxido de carbono y metano, poderosos gases de efecto invernadero.
Está pronosticado que en la medida en que el clima se vuelve más cálido, mayor cantidad de gases serán liberados, hasta llegar a un punto en el que grandes cantidades de gases inundarán la atmósfera, causando un rápido aumento de las temperaturas, dijeron los científicos.
"Masivas cantidades de carbono almacenado en territorios congelados en altas latitudes son cada vez más vulnerables a la exposición a la atmósfera", expresó Pep Canadell, director ejecutivo del proyecto Global Carbon Project, de la organización con base en Australia, Commonwealth Scientific and Industrial Research Organization.
"La investigación muestra que las cantidades de carbono almacenadas en territorios que rodean el Polo Norte han sido enormemente subestimados", agregó.
El estudio aparece en la última publicación de la revista de Global Biogeochemical Cycle.
Canadell dijo que un estudio de cuatro años sobre las últimas investigaciones referentes al permahielo, información sobre nuevos proyectos de perforación, así como también la publicación de datos desconocidos de la Academia de Ciencias rusa, llevaron a repensar los niveles de carbono.
"Las proyecciones muestran que casi todo el permahielo cercano a la superficie desaparecerá a fines de este siglo exponiendo grandes acumulaciones de carbono a la descomoposición y a la liberación de gases invernadero", comentó a través de un comunicado.
Además expresó que si sólo el 10 por ciento del permahielo se derritiera, esto podría llevar a la liberación adicional dentro de la atmósfera de 80 partes por millón de dióxido de carbono equivalente. Esto correspondería a 0,7 grados Celsius de calentamiento global.