LA PAZ, 3 May. (EUROPA PRESS) -
La Asociación Nacional de la Prensa (ANP) de Bolivia mostró hoy su "preocupación" por la situación del periodismo en el país sudamericano y pidió al Gobierno de Evo Morales que adopte medidas para proteger a los profesionales, especialmente en el caso de las agresiones o atentados.
Con motivo del Día Mundial de la Libertad de Prensa, la ANP recordó que en los últimos años los periodistas bolivianos han sido blanco "de agresiones físicas y verbales y ataques de distintos sectores políticos, tanto del oficialismo como de la oposición". "Los periodistas y los medios hemos sido blanco de la incomprensión y de la intolerancia de las autoridades que se resisten a cumplir con los convenios internacionales sobre el respeto a la libertad de prensa y expresión", resaltó la organización en un comunicado.
Por este motivo, la ANP pide a las organizaciones periodísticas que permanezcan "unidas y vigilantes" ante cualquier presión o agresión e insta al Gobierno y al Parlamento a "abstenerse de promover cualquier ley sobre medios que de alguna manera coarte la libertad de expresión consagradas en las leyes internacionales".
La asociación también reclama que se despenalicen para los periodistas los delitos de desacato y difamación de funcionarios públicos, "como lo mandan organismos supranacionales".
ANTE LAS AGRESIONES
La ANP pide a Gobierno y jueces que inicien "de una vez" las investigaciones para castigar a los policías responsables de agresiones a periodistas durante los últimos años.
En concreto, el comunicado refiere al caso del capitán Walter Andrade, quien dirigía el grupo policial que en septiembre de 2009 disparó contra trabajadores de la red UNITEL; el del subteniente George Nava, sospechoso de colocar una bomba junto a una cadena de televisión de Yacuiba, en el departamento sureño de Tarija; y el caso de los policías que en noviembre del año pasado dispararon contra reporteras de la red PAT en Santa Cruz de la Sierra, en el departamento de Santa Cruz (este).
"Los autores intelectuales y materiales de estos hechos que constituyen flagrantes atentados contra la mayor de las libertades: la de expresión y de prensa, no pueden quedar impunes", añade el texto. "Tampoco deben quedar en la impunidad los salvajes asesinatos de los periodistas Carlos Quispe Quispe y Juan Carlos Encinas", concluye.