Actualizado 06/02/2007 23:27

Bolivia.- El Gobierno declara emergencia en 13 provincias por las lluvias que dejan unos 43.000 damnificados


SANTA CRUZ (BOLIVIA), 6 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno de Bolivia declaró hoy en emergencia a 13 provincias del departamento de Santa Cruz (en el este del país) por las lluvias y la crecida de cuatro ríos que han dejado hasta la fecha unas 43.000 personas damnificadas.

El sistema meteorológico nacional pronosticó que continuarán las precipitaciones en los próximos días, debido a los efectos del fenómeno climático 'El Niño', por lo que consideran que la situación continuará empeorando, informó la prensa local.

El coordinador del Centro de Operaciones de Emergencia Departamental (COED), Alcides Vargas, alertó que se mantiene la 'alerta roja' en las 13 provincias de Santa Cruz y que los mecanismo para atender los afectados son escasos.

"Se requiere con urgencia carpas para resguardar de las inclemencias del tiempo a la gente que sale en busca de una zona seca", indicó tras señalar que muchas personas están durmiendo en las carreteras en busca de un área poco susceptible a las inundaciones, pese a que el 98 por ciento de ellas están "intransitables".

Vargas manifestó que el desastre sobrepasó la capacidad que tiene esta institución para asumir estas responsabilidad, al igual que la del Gobierno ya que resulta "imposible llegar con alimentos, medicamentos y ropa para los damnificados".

Las provincias Obispo Santistevan, Ichilo, Ñuflo de Chávez, Warnes y Andrés Ibáñez son consideradas como las más críticas. El prefecto (gobernador), Rubén Costas, hizo un balance de la evaluación de los daños y constató que unas 43.000 personas se encuentran damnificadas en todo el departamento de Santa Cruz, lo que representa una 10.000 familias que perdieron sus viviendas.

El prefecto realizó ayer un recorrido a la altura del río Piraí para observar el comportamiento del afluente y anunció que continuarán vigilando la crecida de las aguas para evitar más desastres, informó el diario local 'El Deber'.

"Desde temprano inspeccionamos el nivel de las aguas (de los ríos) y por su magnitud se le dio una escala de crecida extraordinaria máxima de alerta roja", comentó, tras informar que ya avisaron a los alcaldes de las ciudades aledañas para que estén alertas ante cualquier eventualidad.