Actualizado 30/09/2011 03:41

Bolivia.- La ONU condena el uso "excesivo e indiscriminado" de la fuerza policial contra los indígenas


LA PAZ, 30 Sep. (EUROPA PRESS) -

El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Bolivia ha condenado el uso "excesivo e indiscriminado" de la fuerza policial para reprimir la marcha indígena celebrada el pasado domingo en el municipio de Yucumo, departamento de Beni (norte), contra la construcción de una carretera.

A través de un comunicado, la organización internacional ha condenado la actuación policial del pasado domingo en Yucumo, al tiempo que ha recordado a las autoridades bolivianas su obligación de proteger a toda persona de cualquier forma de violencia, así como de garantizar el ejercicio de los derechos fundamentales, incluido el de manifestación.

No obstante, ha aplaudido las declaraciones del presidente boliviano, Evo Morales, quien ha pedido perdón a los indígenas por los "excesos" policiales, asegurando que su Gobierno no dio instrucciones de reprimir la movilización.

También ha alabado la decisión de Morales de, por un lado, crear una comisión integrada por expertos nacionales e internacionales para que investiguen lo ocurrido y, por otro, suspender el proyecto de construcción del segundo tramo de esta carretera, que unirá Beni y Cochabamba (centro), hasta que se celebre un referéndum en estos dos departamentos.

A este respecto, Naciones Unidas considera que la celebración de este tipo de consultas, "conducidas de buena fe y por medio de las organizaciones representativas", es "importante", ya que servirá para que la población dé su consentimiento "libre, previo e informado" a las decisiones gubernamentales que afecten a sus territorios.

En este sentido, ha instado a ambas partes a iniciar un diálogo en profundidad "para encontrar bases de acuerdos duraderos con el objeto de hacer efectivos los Derechos Humanos de los pueblos indígenas", según informa la Agencia Boliviana de Información (ABI).

Está previsto que una comisión gubernamental de alto nivel se reúna este jueves con los indígenas que forman parte de la Asamblea del Pueblo Guaraní (APG) --una de las organizaciones que impulsa la marcha contra la construcción de la carretera-- en el departamento de Santa Cruz (este), donde analizaran los últimos incidentes.

Los disturbios del pasado domingo se enmarcan en las protestas que las comunidades del Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS) protagonizan desde el pasado mes de agosto contra la construcción de dicha carretera, a cargo de una empresa brasileña.

Estas protestas han convulsionado a Bolivia y han tenido efectos muy negativos en el Gobierno de Morales, un indígena que llegó al poder en 2006 con la promesa de un cambio radical a favor de los más pobres. Hasta el momento, tres ministros y un viceministro han presentado su dimisión.