SAO PAULO, 5 Ene. (EUROPA PRESS) -
Las lluvias que azotan el sureste de Brasil dejaron ayer un total de 12 muertos, además de importantes estragos en los estados de Rio, Sao Paulo y Minas Gerais.
Según informó el diario 'O Folha', sólo en Rio murieron once personas, entre ellas cinco niños, enterradas debido a corrimientos de tierra. Tres de los niños fallecieron por la noche en Nova Friburgo, después de que su casa se viera enterrada por una avalancha de tierra. En el mismo municipio falleció otra persona.
Horas antes, dos hermanos, de seis y siete años, perdieron la vida de la misma forma, así como un hombre de 45 años. Otras dos personas, padre e hijo, perdieron la vida después de que el coche en el que viajaban se viera aplastado por un muro que cayó, en la localidad de Sumidouro.
En Teresópolis, una pareja falleció después de que se viniera abajo el techo de un bar. Además de las víctimas mortales, cerca de 2.000 personas se han quedado sin hogar en Rio.
Ya en Sao Paulo, en Jundiaí, un corrimiento de tierra provocó la muerte a un niño de seis años. Su hermano, de seis meses, resultó herido. Mientras, en la localidad de Valinhos, la Defensa Civil decretó el estado de atención.