CURITIBA (BRASIL), 30 Mar. (de la enviada especial de EUROPA PRESS, María García) -
Las principales organizaciones ecologistas reclamaron al comisario europeo de Medio Ambiente, Stavros Dimas, la adopción por parte de la Unión Europea (UE) de un certificado de origen de los recursos genéticos, al margen del acuerdo que se alcance sobre un régimen internacional para acceder a estos recursos genéticos y al reparto equitativo de beneficios en la octava Conferencia de las Partes del Convenio de Diversidad Biológica (COP 8), que concluye mañana en Curitiba (Brasil).
La UE defiende "un acuerdo legalmente vinculante" sobre un régimen internacional, que podría tener su plasmación más adelante en un certificado, sobre los recursos genéticos que se pueden extraer de fauna y flora silvestre para usos comerciales, sobre todo en el campo de la medicina. No obstante, este acuerdo parece complicado de alcanzar y todo apunta a que se establecerá que este régimen internacional se adopte en la próxima Conferencia de las Partes del Convenio de Diversidad Biológica (COP 9) en 2008, y entre en vigor el año siguiente.
Las organizaciones ecologistas Bird Life, WWF, Greenpeace y Global Foreste Aliance, entre otras, pidieron al comisario europeo que dado que la UE está de acuerdo con un certificado de origen de recursos genéticos, se adelante y lo establezca de manera unilateral, según comentó hoy a los periodistas españoles el director ejecutivo de la Sociedad Española de Ornitología (SEO/Bird Life), Alejandro Sánchez, presente en la reunión.
Por otra parte, las organizaciones también solicitaron al comisario un control de las importaciones que realiza la UE de madera tropical, para evitar las talas ilegales y la sobreexplotación de los bosques. Dimas comentó en el encuentro que sería partidario de que la UE hiciera una llamada de atención en favor de una certificación de madera tropical para aumentar la concienciación en la opinión pública.
En cuanto a la diversidad biológica de las islas, el comisario europeo de Medio Ambiente manifestó su voluntad de que la comunicación de la Comisión Europea de mayo, sobre directrices y prioridades, haga un referencia a las necesidad de proteger la biodiversidad insular.
Finalmente, las organizaciones ecologistas también insistieron en la petición de una moratoria sobre la pesca de arrastre, de la creación de áreas marinas protegidas, de una financiación suficiente de la Red Natura 2000 y de cambiar los subsidios 'perversos' por acciones positivas en agricultura, pesca o aguas.