SAO PAULO, 17 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de la localidad brasileña de Aparecida ha decretado el estado de emergencia debido al retraso de las obras de acondicionamiento de cara a la visita del Papa Benedicto XVI a la ciudad, el próximo mes de mayo, y con el objetivo de poder iniciarlas sin las licitaciones necesarias, según informó el jefe de gabinete del Gobierno local, Eduardo Elache, al diario 'Folha de Sao Paulo'.
Según indica el rotativo las obras de infraestructura de la ciudad están atrasadas y, en algunos casos, ni siquiera han comenzado, cuando falta menos de un mes para la visita del Sumo Pontífice, que llegará el día 11 de mayo al municipio, y para la V Conferencia del Episcopado de América Latina y Caribe, que será inaugurada por el Papa el día 13. Para esos días, Aparecida, que cuenta con poco más de 30.000 habitantes, espera la llegada de al menos 500.000 visitantes.
Para algunos especialistas en derecho administrativo, citados por el rotativo brasileño, el alcalde de Aparecida, José Luiz Rodrigues, incurrió en una "improbidad administrativa" al decretar el estado de emergencia sin que se dé una "calamidad pública" o un "desastre natural", como determina el artículo 1º del Régimen del Estado de Sitio y de Emergencia.
El pasado viernes, una semana después de que el Gobierno regional aprobara el presupuesto de 1,2 millones de reales (unos 435.000 euros), el Ayuntamiento comenzó la obra considerada más importante para asegurar el abastecimiento durante la estancia del Papa en Aparecida: Un depósito de agua con capacidad de 1,5 millones de litros, que puede asegurar el abastecimiento para 250.000 personas y que se suma al depósito existente en la ciudad, con capacidad para abastecer a 350.000 personas.
Ese mismo día, las autoridades locales decidieron decretar el estado de emergencia. Además del depósito, faltan por concluir cuatro aparcamientos y volver a asfaltar las principales calles de la ciudad. "No podemos esperar un mes para hacer las licitaciones de las obras del depósito, de los aparcamientos, el cambio de iluminación del centro. Tenemos que correr para garantizar lo que es urgente", afirmó el jefe de gabinete, que no consideró que sea ilegal ejecutar las obras sin licitación. "Todo está obedeciendo a los trámites legales de un estado de emergencia. La ciudad tiene que garantizar la seguridad de los visitantes", agregó.
Además, entre las medidas que también se anunciaron por el Ayuntamiento durante el estado de emergencia se encuentra la contratación de nuevos guardas municipales y el alquiler de 1.000 lavabos públicos.