Actualizado 15/08/2009 18:53

California paga para atraer cineastas a Hollywood

Por Dan Whitcomb

LOS ANGELES (Reuters/EP) - Luego de una década en que las producciones cinematográficas abandonaron lentamente Hollywood atraídas por los incentivos financieros de Canadá primero y de otros estados estadounidenses después, California espera atraer las películas de vuelta a casa.

Pero a algunos les preocupa que los incentivos puedan resultar demasiado pequeños o llegar muy tarde después de que el número de películas de estudio rodadas en California se desplomara a menos de la mitad respecto al 2003.

La televisión abierta y por cable y los rodajes comerciales, que en los últimos años habían resultado más proclives a permanecer en Hollywood, también han disminuido significativamente. Este año, se filmaron 44 de 103 episodios pilotos fuera de la frontera sur de California.

"En el 2008 se registraron los peores números y los primeros meses del 2009 muestran una caída del 50 por ciento respecto de estos", dijo Paul Audley, presidente de FilmLA, la organización sin fines de lucro que coordina la producción de cine, TV y publicidad en Los Angeles y sus alrededores.

"Eso solo puede describirse como un desastre", agregó.

La producción cinematográfica y las industrias relacionadas generan 38.000 millones de dólares para la economía de California y emplean a casi 250.000 personas, según la oficina del gobernador, Arnold Schwarzenegger.

Si bien contribuye con menos del 3 por ciento de la producción estatal, la producción cinematográfica también agrega valor a la industria del turismo y del entretenimiento.

Schwarzenegger, la ex estrella de Terminator que ha abogado por luchar contra la huída de la producción cinematográfica, aprobó en febrero los primeros incentivos de la historia de California.

El paquete está dirigido a las películas más proclives a dejar el estado e incluye un crédito impositivo del 20 al 25 por ciento.

LO QUE EL VIENTO SE LLEVO

Algunos creen que los incentivos de California podrían no ser suficientes para competir con otros estados del país que ofrecen hasta el doble de créditos impositivos, a menudo con menos trámites.

"El de California era un paquete de incentivos para largometrajes en los que el mayor filme de bajo presupuesto que se podía producir era de 75 millones de dólares, con lo que mucha gente sintió que no era lo suficientemente alto, especialmente si estás tratando de generar éxitos de taquilla," dijo Jack Kyser, economista jefe de Los Angeles Economic Development Corp.

Como la producción cinematográfica ha comenzado a abandonar California, las repercusiones económicas se sienten de un lado a otro del estado, en innumerables comercios, directa o indirectamente relacionados con la industria, que ya estaban en problemas en tiempos de recesión.

En julio, la segunda mayor casa de utilería de Hollywood, 20th Century Props, cerró sus puertas después de 40 años, y su dueño manifestó que había sido víctima de la huída de producciones y de una huelga de 14 semanas de guionistas de cine y televisión que terminó en febrero.

"Hay tantos espectáculos que se han ido", dijo el propietario de 20th Century, Harvey Schwartz. "Ugly Betty fue el primero de los grandes en cerrar en California, despedir a todos y mudarse a Nueva York por esa devolución fiscal del 30 por ciento", señaló.

Los estudios Culver, unos estudios históricos que albergaron la filmación de "Lo que el viento se llevó" y "El ciudadano Kane", también se vieron perjudicados.

PRIMER PASO

Jamie Cella ha dirigido los estudios Culver desde el 2006 y ha visto la producción cinematográfica desplomarse en Hollywood, donde hasta hace sólo unos pocos años se filmaba el 70 por ciento de todos los largometrajes realizados.

"Es importante, es una gran parte de la economía aquí", dijo Cella. "Estos son trabajos altamente calificados y muy bien remunerados para personas que saben cómo gastar su dinero. Cada dólar ganado en la industria del entretenimiento es gastado 19 veces, mientras que en algunas industrias es cuatro o cinco veces", agregó.

Cella dijo que Hollywood estaba adoptando una postura expectante ante los incentivos de California, y pocos parecían dispuestos a predecir si los créditos impositivos alcanzarán para cambiar la marea.

"Ellos preferirían que (los incentivos) fuesen más generosos pero son vistos como un buen primer paso", dijo Cella, y agregó que la mayoría de los productores preferiría filmar en California si se justificase financieramente.

"De modo que ahora cuando se aprueban largometrajes, muchos ni siquiera consideran California por los reembolsos en otros estados. Esperemos que con este programa podamos conservar algunas de esas producciones aquí", señaló.