Actualizado 30/03/2017 06:18

Las canteras ilegales, presuntas responsables del derrumbe en la autopista Medellín-Bogotá

   MEDELLÍN, 27 Oct. (Colprensa/Notimérica) -

   Unos 60.000 metros cúbicos de tierra taponaron este miércoles la autopista que conecta Medellín y Bogotá, a su paso por el sector de El Cabuyal. Un número aún indeterminado de personas quedó sepultado bajo la tierra, mientras que en la parte alta de la montaña, varias máquinas retroexcavadoras estuvieron a punto de caer.

   Las máquinas llevaban a cabo una explotación minera que operaba sin licencia, según confirmó el alcalde de Copacabana, Óscar Alberto Restrepo Restrepo. Según el mandatario, todo indica a que esas explotaciones ilegales serían las responsables de la emergencia.

"Nosotros hemos estado haciendo controles a esas canteras para saber cuáles son legales o ilegales. Les hemos decomisado maquinaria, hemos ordenado cierres, hemos detenido personas, y ellos siempre vuelven", explicó Restrepo.

   El mandatario dijo que reunirá las evidencias de los operativos realizados para contrastarlas con los documentos presentados por los dueños de las explotaciones, a fin de determinar su responsabilidad en esta tragedia que, hasta ahora, se ha cobrado la vida de siee personas.

"Cerca de donde ocurrió el derrumbe hay entre cinco y seis canteras. Ellos creen que el derecho al trabajo les da permiso de explotar ilegalmente, pero les hemos dicho que no pueden, que están dañando las patas de la montaña, desestabilizando taludes y contaminando el medio ambiente y las cuencas", agregó el alcalde.

OBREROS, ENTRE LOS DESAPARECIDOS

   Por su parte, la directora de gestión del riesgo de Copacabana, Adriana Toro, confirmó que las informaciones preliminares indican que entre 5 y 11 personas que trabajaban en la cantera La Nieve, en el sitio de la emergencia, están desaparecidas.

   Varios testigos relataron lo sucedido. Este es el caso de Tatiana Cadavid Yépes, vecina de la cantera, quien explicó que por la mañana escuchó ruidos extraños y, desde la puerta de su casa, alcanzó a ver cómo la montaña se tragaba la carretera. Cuando pudo reaccionar, bajo con su esposo y su suegra para buscar a Horacio, otro familiar que trabajaba la cantera.

"Lo encontramos con vida porque estaba más arriba de donde se desprendió la avalancha. En la oficina de la cantera había seis personas, a dos ya las encontraron pero hay cuatro de los que no sabemos nada", dijo.

   La mujer narró que de la cantera sacaban gravilla y otros materiales de construcción. "A eso le metían pólvora. Ya los habían demandado y la gente había recogido firmas para que se fueran, pero el dueño le metió abogados a eso, entonces seguían haciendo mina", agregó.