Actualizado 11/04/2007 21:09

Chile.- Uno de cada 4 casos de corrupción se produce en empresas públicas, según encuesta


SANTIAGO, 11 Abr. (De la corresponsal de EUROPA PRESS Claudia Riquelme) -

Uno de cada cuatro casos de corrupción se produce en las empresas públicas chilenas, según una encuesta realizada por el Instituto Libertad y Desarrollo (ILD), vinculado a la derecha opositora, y que fue dada a conocer hoy en Santiago.

La misma muestra indica que los niveles de corrupción subieron del 4,5 por ciento en 2005 al 5,5 por ciento en 2006, lo cual implica una regresión a los niveles registrados en 2002 y 2003.

Asimismo, se señala que mientras en 2004 se sancionaban 20 de cada mil casos; en 2005 la cifra bajó a cinco y, en 2006, subió a 6 de cada mil.

El organismo de estudios señaló que entre las organizaciones con mayores índices de corrupción, el sondeo sitúa a las empresas públicas, las municipalidades y los ministerios, en ese orden.

Asimismo, las instituciones con menos índices corruptos serían, según los encuestados, Carabineros (policía militarizada chilena), la Contraloría General de la República y las Fuerzas Armadas.

La muestra, que se realiza sistemáticamente desde 2002, mide percepción y hechos y se realizó entre el 15 de noviembre de 2006 y el 26 de enero de 2007, mediante una encuesta probabilística anónima con un cuestionario estructurado que se envía por correo a 425 empresarios y ejecutivos seleccionados.

El ILD señaló que las principales formas de corrupción, que el 40 por ciento de los encuestados considera son utilizadas para obtener licitaciones de fondos públicos, son el tráfico de influencias, que registra un 44 por ciento, y los pagos ilícitos, con un 34 por ciento. Le sigue el mal uso de recursos o bienes fiscales, con un 18 por ciento.

Un 62 por ciento de los entrevistados estima que la corrupción es mayor o mucho mayor a la del año pasado, un 35 por ciento que se mantuvo igual y otro 3 por ciento que es menor o mucho menor a la de 2005.

La mitad de los encuestados dijo haber sido testigo de algún caso de corrupción, no obstante un 78 por ciento confiesa no haber hecho la denuncia, cifra que muestra un aumento respecto de 2006, cuando un 67 por ciento no entregaba los antecedentes a la justicia.

Las razones para no denunciar son el considerar que no habrá ningún efecto (42 por ciento) y el temor a las represalias (26 por ciento).