Actualizado 13/09/2017 08:30

Científicos brasileños aseguran que la restricción de calorías reduce la grasa pero aumenta el pelo en ratones

Ratones de laboratorio
LIGIA ESPERANZA DÍAZ

   MADRID, 12 Sep. (EP/Notimérica).-

   La restricción de calorías puede ayudar a los ratones a mantenerse delgados y vivir más tiempo, pero también significa menos grasa para mantener sus cuerpos calientes. Investigadores en Brasil han encontrado que la piel del ratón responde a la restricción calórica estimulando el crecimiento del pelo, aumentando el flujo sanguíneo y alterando el metabolismo celular para aumentar la eficiencia energética.

   El estudio, publicado este martes en 'Cell Reports', revela que los animales pueden usar esto como una adaptación evolutiva para mantenerse calientes y vivos en condiciones de alimentación limitadas.

   "Los cambios en el pelaje y la piel fueron bastante evidentes, y son interesantes porque eran visibles después de unos pocos meses, cuando los animales aún no son viejos --dice la autora Alicia Kowaltowski, profesora del Instituto de Química de la Universidad de Sao Paulo, en Brasil--. Los cambios pueden estar relacionados con un aumento en las células madre de la piel, que ayudan a preservar la piel de los efectos del envejecimiento, que también pudimos detectar".

   Una dieta restringida en calorías ya se ha asociado con una larga lista de beneficios para la salud, desde el aumento de la esperanza de vida y la reducción de la resistencia a la insulina para ayudar a combatir el cáncer, pero sus efectos sobre la piel se han estudiado poco. Para aprender más, su equipo, incluyendo a la investigadora postdoctoral Maria Fernanda Forni, centrada en el estudio de células madre de la piel, se unió a Jorge Shinohara, del Departamento de Química Fundamental de la Universidad de Sao Paulo, quien construyó un sensor de temperatura a medida para la piel del ratón.

   Los científicos compararon ratones que podían comer todo lo que querían, en cualquier momento --lo que significaba que eventualmente se convirtieron en animales con sobrepeso_con roedores restringidos a comer el 60 por ciento de las calorías que ingerían los primeros durante seis meses. Los ratones con restricción de calorías perdieron alrededor de la mitad de su masa corporal y mostraron un pelaje más uniforme, más grueso y más largo.

EXPANSIÓN DE LAS CÉLULAS MADRE DEL FOLÍCULO PILOSO

   El equipo observó que, a nivel celular, uno de los efectos secundarios de la dieta fue una expansión de las células madre del folículo piloso, lo que condujo a un aumento del crecimiento del folículo piloso y tasas de retención.

   En comparación con los ratones libres, los ratones con restricción calórica también presentaban tres veces más vasos sanguíneos en su piel, para llevar más sangre caliente a la superficie, además de que sus células de la piel mostraron diferencias en el metabolismo, de modo que perdieron menos energía en forma de calor a través del tiempo.

   Entonces, los científicos afeitaron zonas del pelo de los ratones de ambos grupos para confirmar que el cabello extra ayuda a calentar a los animales con restricción de calorías. De hecho, basándose en las mediciones de pérdida de calor, las coberturas de pelajes más gruesos ayudaron a aislar el calor, y sin la adaptación, los ratones con restricciones calóricas estuvieron más letárgicos y mostraron signos de interrupción del metabolismo.

   "Estos hallazgos son especialmente significativos, ya que desvelan no sólo un efecto notable de la restricción calórica en la piel, sino también un mecanismo adaptativo para salir adelante ante un menor aislamiento por cambios en la piel bajo condiciones de consumo calórico reducido --subraya Kowaltowski--. Creo que la comunidad de investigación estará interesada en pensar en la piel y el pelaje como actores integrales en las respuestas metabólicas y el control".

   Este grupo de científicos quiere ahora centrarse en entender las señales involucradas en la promoción de los cambios en la piel que observaron con la restricción de calorías. Kowaltowski dice que, si se comprenden estas vías, se podrían descubrir objetivos para mantener la piel sana durante el envejecimiento.