Actualizado 16/12/2009 14:34

Clima.- Uribe defiende que los países desarrollados se esfuercen más pero dice que Colombia no se quedará atras

Se compromete a proteger la selva, promover los biocombustibles sin destruirla y actualizar las refinerías del país


BOGOTÁ, 16 Dic. (EUROPA PRESS) -

El presidente colombiano, Álvaro Uribe, defendió poco antes de viajar este miércoles a Copenhague, para participar en la Cumbre de la ONU sobre cambio climático, la idea de que los países desarrollados realicen mayores esfuerzos en materia de reducción de emisiones que los países en vías de desarrollo, al tiempo que aseguró que Colombia no se quedará "atrás" en este objetivo.

"Colombia ha hecho un gran esfuerzo, pero le vamos a pedir al mundo que el esfuerzo de todos tiene que ser superior" al considerar que el mundo debe dar una respuesta seria al problema que plantea el calentamiento global, explicó el mandatario en una discurso a la radiotelevisión pública.

"Estamos dispuestos a apoyar ese tema, y también estamos dispuestos a no quedarnos atrás en materia de superiores esfuerzos" a pesar de resaltar que Colombia hace "poco daño" al medio ambiente, agregó el mandatario.

En los últimos años Colombia, recordó, ha sufrido "severos inviernos, inundaciones gravísimas, y ahora estamos con la profunda preocupación de una larga sequía, por causa del cambio climático", insistiendo en los "graves riesgos" a los que se enfrenta el país latinoamericano por el calentamiento global.

"Poco contribuimos a las emisiones, comparativamente. Mientras le aportamos al Producto (Interior Bruto) del mundo el 0,5 por ciento, a las emisiones le aportamos menos: el 0,37. Pero mucho, mucho, nos perjudicamos", lamentó.

El mandatario subrayó por ello la importancia de "mantener" el 52 por ciento de superficie de selva que hay en el país. "Protegerla es nuestro gran compromiso en materia de contribución para evitar los efectos desastrosos del cambio climático", aseguró.

Asimismo, destacó la "inversión enorme" que está realizando su Gobierno para "actualizar" las refinerías del país con el objetivo de "reducir de manera esencial las partículas de azufre en la gasolina" y contribuir a preservar así el medio ambiente.

También quiso dejar claro que el "avance en biocombustibles" que defiende el Gobierno colombiano "tiene dos restricciones: no puede ser a expensas de la seguridad alimentaria ni se puede destruir un milímetro cuadrado de selva" y defendió que "un altísimo porcentaje de la energía que genera" el país es "energía hidroeléctrica" y, por tanto, renovable.