BOGOTÁ, 5 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha lamentado este lunes la muerte de más de un centenar de personas como consecuencia de los estragos que está causando 'La Niña', fenómeno climatológico que ha considerado el "karma" de su gobierno.
El último incidente ha ocurrido este lunes cuando siete personas murieron después de que un alud de tierra sepultara una vivienda en el municipio de Herveo, en el norte del departamento de Tolima (oeste). Según la Dirección Nacional de Gestión de Riesgo, hasta el pasado domingo la ola invernal había dejado al menos 116 muertos.
"Siete víctimas más de esta maldita 'Niña', que ha sido el karma de mi gobierno", ha expresado Santos, tras hacer un recorrido por el río Bogotá, en el municipio de Chía, en el departamento de Cundinamarca (centro).
"Desde el primer día en que me posesioné, ya esta Niña estaba madurándose, ya estaba lloviendo más de lo normal, y en estos 16 meses de gobierno ha sido el peor problema que hemos tenido que afrontar", ha lamentado.
Santos ha alertado de que, pese a las millonarias inversiones que ha hecho su gobierno para evitar los desbordamientos de los ríos, todavía "hay municipios que están especialmente vulnerables y que nos preocupan mucho".
En los últimos tres meses se han invertido 43.000 millones de pesos (16,5 millones de euros). Unas 480.000 personas han sido atendidas por la Dirección de Gestión de Riesgo, con el apoyo de la Policía Nacional, el Ejército, la Cruz Roja, Defensa Civil y los bomberos.
Sin embargo, unas 420.000 personas han resultado afectadas por las precipitaciones que han provocado deslizamientos de tierra e inundaciones en al menos 380 municipios de esa nación sudamericana. El Gobierno estima que los efectos de 'La Niña' se sentirán hasta el próximo marzo.
El año pasado, la ola invernal dejó unos 500 muertos y más de 2,1 millones de afectados, además de pérdidas millonarias en la agricultura.
Santos ha asegurado que "Colombia es uno de los países más vulnerables de todo el planeta al cambio climático", al hacer un llamamiento a "los países que hoy están siendo reticentes en comprometerse con acciones concretas para bajar la emisión de carbono y para combatir el cambio climático".