WASHINGTON, 17 May. (Notimérica) -
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha presentado este jueves un nuevo plan migratorio. Sin embargo, su implantación parece ser muy poco viable incluso antes de haber sido presentado ante el Congreso, ¿por qué?
No solo se han opuesto a las medidas anunciadas desde la Casa Blanca los simpatizantes demócratas, sino que miembros del Partido Republicano tampoco han mostrado su apoyo a Trump, como ha sido el caso del senador Lindsey Graham.
Bajo el consejo de su yerno Jerard Kushner y el asesor presidencial Stephen Miller, el mandatario norteamericano ha presentado su proyecto migratorio que gira en torno a dos pilares: asegurar la frontera y establecer un sistema de inmigración en el que tengan preferencia los perfiles más brillantes.
PROPUESTAS
El líder republicano tiene por objeto aumentar de un 12 a un 57 por ciento el número de inmigrantes que obtienen su residencia permanente por su talento o trabajo, rebajando así los que consiguen el permiso por motivos familiares.
Asimismo, dentro de las metas del proyecto está la de reducir el número de las llamadas 'green card' --tarjetas de residencia permanente que otorga el gobierno de los Estados Unidos a los inmigrantes legales que residen en el país--.
En palabras de Trump, su plan de inmigración "establece un nuevo sistema de inmigración legal que protege los salarios estadounidenses, promueve los valores estadounidenses y atrae a los mejores y más brillantes de todo el mundo", ha indicado.
En esta línea, el presidente también reservó un espacio para criticar las propuestas demócratas que, según este, defienden "fronteras abiertas" y "salarios más bajos".
INVIABILIDAD
La razón por la que se prevé que no sea aprobada la propuesta de Trump es porque esta no considera entre sus puntos la cuestión de los llamados 'dreamers', siendo esta una de las más polémicas.
Al respecto, la jefa de prensa de la Presidencia, Sarah Sanders, justifica la ausencia de este asunto por haber fracasado siempre que se ha incluido dentro de una propuesta gubernamental, según declaraciones recogidas por 'El País'.
Fue en septiembre de 2017 cuando Trump anunció que tenía intención de eliminar el programa DACA, cuyos destinatarios a menudo son conocidos como "dreamers", que fue establecido por el expresidente demócrata Barack Obama.
El programa protege de la deportación a unos 700.000 personas de entre 15 y 36 años, en su mayoría hispanos, y les otorga permisos de trabajo por períodos de dos años, plazo después del cual deben volver a postular.