Actualizado 02/05/2015 12:02

Cuba y Honduras, los países con menos libertad de prensa en América Latina

Prensa

MADRID, 2 May. (Notimérica) -

   La libertad de prensa ha alcanzado su nivel más bajo de la última década, según el último estudio elaborado por la organización estadounidense Freedom House. 'Libertad de Prensa 2015' señala la presión estatal de países como Cuba, las tensiones sociales de Venezuela o la violencia de grupos radicales de Honduras como los responsables del atentado contra el periodismo en América Latina.

   Los periodistas de todo el mundo se enfrentan a restricciones por parte de varios grupos: los Gobiernos, que emplean tácticas de arresto y censura para evitar la crítica y se promocionan a través de la publicidad; terroristas y otras fuerzas no estatales secuestran y asesinan para que no se cubran los conflictos armados; y los medios privados manipulan la información para su beneficio empresarial.

   Paradójicamente, pese a que en la actualidad exista un acceso y una publicación ilimitada de información, cada vez más zonas del mundo se convierten en inaccesibles para la profesión.

   Según el estudio, durante 2015 han aumentado las zonas en las que la intimidación y la violencia por parte de grupos radicales y autoridades locales contra los periodistas limita el acceso, evitando el conocimiento de la delincuencia y la corrupción que se dan en el territorio, como ocurre en México, Ecuador, Honduras, México, Perú o Venezuela.

   También, las protestas callejeras constituyen un riesgo para los reporteros en casos como el venezolano o el brasileño.

   En América Latina, Cuba se encuentra entre los 10 países del mundo con menor libertad de prensa, junto a Bielorrusia, Crimea, Guinea Ecuatorial, Eritrea, Irán, Corea del Norte, Siria, Turkmenistán y Uzbekistán. También, Honduras es uno de los 18 territorios que más a empeorado además de Grecia, Hong Kong, Islandia, Serbia, Sudáfrica, Argelia, Azerbaiyán, Egipto, Libia, Sudán del Sur y Tailandia.

PAÍS A PAÍS

   Todos los países han sido valorados por Freedom House del 1 al 100, siendo éste último el peor en cuanto a libertad de prensa.

   En cuanto a Cuba, pese a la reciente apertura diplomática con Estados Unidos, es la peor zona del desempeño del periodismo en el continente, con una puntuación de 91 puntos. En la isla, la censura y el encarcelamiento ha sido común para los reporteros.

   El país ecuatoriano ha sido valorado, como consecuencia de la presión del Gobierno con las restricciones de la Ley de Comunicación 2013 y el acoso generalizado hacia el periodismo, con 64 puntos.

   La violencia existente en México lo convierte en uno de los lugares más peligrosos del mundo para los reporteros, cuya puntuación ha caído a 63. Una nueva ley que permite más control gubernamental y el duro registro ha potenciado este resultado.

   En Argentina, la relación entre el gobierno y crítica ha llevado a duras sanciones persistentes. Juan Pablo Suárez, director del diario 'Última Hora', fue acusado por "incitar a la violencia colectiva y a negarse a entregar el material de archivo".

   Los medios de comunicación de Brasil se enfrentan a amenazas de violencia, penas de cárcel y a la censura judicial. Cuatro reporteros fueron asesinados en 2014, y varios fueron atacados mientras cubrían las protestas contra el Gobierno y los gastos de la Copa Mundial.

   La puntuación de Honduras ascendió de 64 a 68 debido a la censura oficial, al poder de los propietarios de los medios, que llevaron a la intimidación y la violencia mortal en 2014.

   Perú también empeoró, desde un valor de 44 a 47, por el aumento de las amenazas de muerte, la violencia contra periodistas y la falta de voluntad política para abordar el problema de la impunidad.

   La puntuación de Venezuela disminuyó de 78 a 81. El aumento de amenazas y ataques físicos contra la prensa, sumados a los problemas económicos exacerbados por el Estado, que derivaron en la dificultad para comprar papel de periódico, afectaron a la viabilidad financiera de los medios de comunicación, dificultando su capacidad para cubrir las noticias libremente.