Actualizado 03/05/2006 20:25

Cuba.- Organizaciones cubanas en España piden a las empresas que no sean "cómplices ni se beneficien de la dictadura"

Ramón Jáuregui considera que la RSC en América Latina ayudaría a las empresas a conseguir "una legitimación social"


MADRID, 3 May. (EUROPA PRESS) -

Organizaciones civiles del exilio cubano afincadas en España exigen a las empresas "no ser cómplices del sufrimiento del pueblo cubano" y dejar a un lado "el cinismo" con sus inversiones en la isla e instan a "dejar de hacer la vista gorda" de lo que ocurre con los trabajadores cubanos.

Esta idea surgió de la II Conferencia del Grupo Internacional para la Responsabilidad Social Corporativa en Cuba (GIRSCC), que se celebra entre hoy y mañana en la sede del Parlamento Europeo en Madrid, donde se dieron cita la mayoría de las organizaciones anticastristas radicadas en nuestro país, como por ejemplo, la Plataforma Cuba 'Democracia Ya!' o 'Solidaridad con Cuba'.

Las empresas españolas son participadas del capital social cubano, pero a pesar de esta "limitación", las asociaciones exigen que la defensa de los Derechos Humanos y laborales de los trabajadores cubanos "trascienda esta situación".

Así, piden que las compañías extranjeras, incluidas las españolas que "actúen igual en su país que en la isla" y "no se beneficien de la dictadura". En este contexto, se planteó entre los asistentes la posibilidad de crear "una cláusula en materia de Derechos Humanos" para las empresas.

PARLAMENTARIOS ESPAÑOLES

Por su parte, el presidente de la Subcomisión para potenciar la RSC en las empresas del Congreso de los Diputados, Ramón Jáuregui, y el responsable de Relaciones Internacionales y parlamentario en el Congreso por CIU, Jordi Xuclà, coincidieron en que se puede trabajar "con las empresas en Cuba".

Xuclà reconoció que no se les puede pedir a las compañías "ser agitadores sociales" pero sí su participación "para el día después", el momento en el que Fidel Castro fallezca teniendo en cuenta que en agosto cumplirá 80 años. Asimismo, destacó la "opinión no favorable" en España al embargo.

En su opinión, en el momento actual sería muy difícil que las compañías tengan políticas de RSC "aunque quieran", subrayó. "La RSC no se puede dar en Cuba en estos momentos", destacó. Y si no hay responsabilidad social, apuntó, es porque la isla "no cuenta con una economía de mercado, ni una sociedad abierta que dé protagonismo a las empresas y porque el poder público no está dispuesto a fomentarla". "No es un marco favorable", añadió.

Por su parte, Jáuregui explicó las dos opciones existentes en materia de responsabilidad en Cuba. La primera, y por la que abogaron la mayoría de los asistentes al encuentro, considerar responsable no invertir en la isla y que las empresas "se vayan".

La otra, sería "intervenir en el terreno" y en su opinión, "existe un margen de actuación". Puso como ejemplo otros países donde no existen sindicatos y son las propias empresas quienes los crean para que su imagen en el exterior no se vea dañada por actuaciones poco responsables.

Por otro lado, a nivel más general, Jáuregui destacó que las empresas españolas deben ser "especialmente responsables" en América Latina porque responden a sectores básicos para los ciudadanos, como el agua o la energía, y, en su opinión, "deberían tener un plus en RSC".

Además, consideró que la responsabilidad social es necesaria en la región latinoamericana para conseguir que "una legitimación social en los países que en estos momentos no existe". "Tienen que encontrar un compromiso de corresponsabilidad con la ciudadanía", concluyó.