La comunidad internacional expresa su "preocupación" por la muerte de Acosta y pide una investigación
MADRID, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -
Dos agentes de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM) han sido detenidos por su presunta relación con la muerte del capitán de corbeta Rafael Acosta, según ha informado el abogado del fallecido, Alonso Medina.
"Detienen a dos funcionarios del DGCIM (...) como autores del homicidio del capitán de corbeta Rafael Acosta", ha anunciado Medina en Twitter.
El letrado ha detallado que han sido acusados de un delito de homicidio, "ignorando la legislación contra la tortura", y que comparecerán en un tribunal en las próximas horas.
El autoproclamado "presidente encargado" de Venezuela, Juan Guaidó, informó el sábado sobre la muerte de Acosta. De acuerdo con su versión, fue torturado por el DGCIM, que le detuvo el pasado 21 de junio por su presunta implicación en la fallida sublevación contra el Gobierno de Nicolás Maduro.
Guaidó ha exigido una investigación internacional sobre la muerte de Acosta, que se suma a la del diputado Fernando Albán, que en octubre se precipitó por una ventana del Helicoide, una de las sedes en Caracas del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN), en lo que la oposición denuncia como un asesinato y el Gobierno tacha de suicidio.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha ordenado una investigación interna sobre la muerte de Acosta, aunque al mismo tiempo ha incidido en que estaba acusado de "graves actos de terrorismo, sedición y magnicidio en grado de frustración".
PREOCUPACIÓN INTERNACIONAL
El Gobierno mexicano de Andrés Manuel López Obrador ha emitido un comunicado en el que ha lamentado la muerte de Acosta, subrayando que "falleció mientras se encontraba bajo custodia de autoridades venezolanas con aparentes signos de tortura".
México, uno de los pocos países de la región, junto a Uruguay, que mantiene una postura neutral respecto a la crisis venezolana, también ha reiterado "su preocupación por la situación de los Derechos Humanos y del debido proceso que se vive en Venezuela, así como de la inmunidad parlamentaria de los integrantes de la Asamblea Nacional".
En un tono más duro, el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, ha exigido "verdad y justicia por el asesinato" de Acosta, del que culpa directamente a "la dictadura".
En la misma línea, el Grupo de Lima, ha repudiado "las continuas prácticas de detenciones arbitrarias y torturas a las que el régimen ilegítimo de Nicolás Maduro somete a quienes considera sus opositores", y ha instado a la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, a actuar sin dilación para que los derechos de los venezolanos sean restablecidos".
"Denunciamos la muerte sin sentido del capitán Acosta a manos del régimen de Maduro. La Agencia de Contrainteligencia Militar (DGCIM) es responsable de su tortura y su muerte junto a sus escoltas cubanos", ha escrito en Twitter el asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Bolton.
La Unión Europea, por su parte, ha reclamado una investigación "completa e independiente" sobre la muerte de Acosta "mientras estaba bajo la custodia de las fuerzas de seguridad venezolanas". En su opinión, este caso pone de relieve "la naturaleza arbitraria del sistema judicial y la falta de garantías y derechos" para los detenidos en Venezuela.
Desde España, el ministro en funciones de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Josep Borrell, ha acudido a Twitter para expresar su "profunda consternación" y reiterar el llamamiento comunitario para que haya "una investigación independiente de las circunstancias", así como "respeto al debido proceso y la integridad física del resto de personas bajo custodia de los cuerpos de seguridad".
CRISIS VENEZOLANA
La crisis política en Venezuela se agravó el 10 de enero, cuando Maduro decidió iniciar un segundo mandato de seis años que no reconocen ni la oposición ni buena parte de la comunidad internacional porque consideran que las elecciones presidenciales del 20 de mayo fueron un fraude.
En respuesta, Guaidó se autoproclamó mandatario interino el 23 de enero con el objetivo de cesar la "usurpación", crear un gobierno de transición y celebrar "elecciones libres". Ha sido reconocido por Estados Unidos, numerosos países latinoamericanos, así como varios europeos, entre ellos España.
Entretanto, más de cuatro millones de venezolanos han abandonado el país en los últimos años a causa de la crisis humanitaria que sufre la nación caribeña. La ONU advierte de que, si la tendencia continúa, a final de 2019 podrían sumar más de cinco millones.