Actualizado 21/10/2015 21:37

Los dos jóvenes linchados en Puebla eran estudiantes que realizaban encuestas

   MÉXICO DF, 21 Oct. (Notimérica) -

   Los dos jóvenes que fueron linchados al ser confundidos con unos secuestradores por la población local en Ajalpan, Puebla, en el centro de México, en realidad eran dos estudiantes universitarios que trabajaban realizando encuestas para una empresa de marketing de México DF.

   El presidente municipal de Ajalpan, Gustavo Lara Torres, ha confirmado la identidad de las dos víctimas, los hermanos José Abraham Copado Molina, de 25 años de edad, y Rey David Copado Molina, de 35 años de edad; ambos estudiantes de la Universidad de Tulacingo.

   El suceso tuvo lugar este lunes, cuando los habitantes de Ajalpan acusaron a un grupo de personas --tres hombres y una mujer-- de formar parte de una banda de secuestradores dedicada a la captura de niños y ancianos.

   El alcalde ha indicado que los dos jóvenes se encontraban entre los detenidos por la denuncia de ciudadanos que aseguraban que se encontraban en actitud "sospechosa", cuando en realidad estaban trabajando realizando encuestas.

   Según los locales, una niña había denunciado que los dos sujetos se la habían querido llevar, por lo que los universitarios fueron retenidos y trasladados a la Alcaldía.

   Entonces, según ha explicado el alcalde, llevaron a la niña a la Alcaldía para que identificara a los supuestos agresores, aunque la menor rechazó que los dos jóvenes fueran los responsables. Sin embargo, la multitud enfurecida reclamaba venganza.

La Policía consiguió resguardar a la mujer y a un hombre, pero los dos jóvenes fueron capturados por los residentes locales, que les dieron una brutal paliza antes de quemarlos vivos ante la presencia de los agentes municipales.

   La multitud, ya enfurecida, no se conformó con este linchamiento y prendió fuego al Ayuntamiento y saquearon la sede de varios organismos públicos, incluidos la Procuraduría General de Justicia, la Tesorería Municipal y Seguridad Pública, donde se hicieron con armamento. Además, ocho personas resultaron heridas, tres funcionarios y cinco policías municipales.

   En el último mes al menos diez personas han sufrido linchamientos y cuatro de ellas han muerto. Se trata de una práctica cada vez más común en pequeños núcleos urbanos y en zonas rurales debido al hartazgo de los mexicanos por la inseguridad en las calles.