BUENOS AIRES, 31 Ene. (Notimérica) -
Dos adolescentes de 12 años de edad fueron presuntamente drogadas y violadas por un empleado judicial de la provincia argentina de Mendoza. Una serie de análisis bioquímicos confirmaron que las niñas fueron abusadas y drogadas con un cóctel de alcohol, marihuana y cocaína.
Al acusado, identificado como Lucas Fernández Serione, de 30 años, lo encontraron con las dos niñas dentro de su coche en la zona del dique el Carrizal, localidad de Rivadavia. El hombre trabajaba como auxiliar de la Unidad Fiscal de Santa Rosa, según informaron medios argentinos.
Fernández fue detenido y se espera que en los próximos días se avance con el requerimiento de prisión preventiva. Además del acusado, otro nombre, identificado como Matías, también participó en el suceso aunque decidió irse del lugar antes de que las autoridades llegaran, por lo que está siendo buscado.
Según el testimonio de las menores, la noche del miércoles de la semana pasada ellas se encontraban en una plaza cuando el acusado y su amigo las invitaron para tomar algo. Se subieron a un coche y fueron a una fiesta en el apartamento del presunto agresor. Horas después fueron a un dique --construcción para evitar el paso del agua--.
Una pareja que pasaba por el lugar alertó a la Policía sobre la presencia de un coche sospechoso en una zona poco transitada. Tiempo después llegó la Policía, que encontraron al hombre con una de las menores en el asiento trasero, mientras que la otra chica estaba en el delantero. Ambas declararon en un primer momento que tenían 14 años, pero luego reconocieron su edad real, 12 años.
Tras practicarles exámenes toxicológicos se supo que las dos menores habían consumido cocaína. Estas quedaron bajo la custodia del Órgano Administrativo Local (OAL), encargado de velar por los derechos de los menores.
En un allanamiento realizado en la casa del empleado judicial hallaron vasos, algunos con marcas de lápiz labial, y restos de marihuana, mientras que en la basura encontraron un teléfono móvil y un cd que remitieron para su análisis a la División de Delitos Tecnológicos, según recoge el diario 'Popular'.