Actualizado 24/06/2014 06:26

Arrestan a un venezolano amenazas tras la masacre en Sandy Hook

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Foto: ADREES LATIF / REUTERS

NUEVA YORK, 24 Jun. (Reuters/EP) -

   Un venezolano sospechoso de haber hecho decenas de llamadas amenazantes tras la masacre del 2012 en la Escuela Elemental Sandy Hook en Connecticut (Estados Unidos), diciendo que fue él quien disparó y acabó con la vida de 26 personas, ha sido llevado este lunes ante una corte federal tras ser arrestado el pasado fin de semana.

   El venezolano Wilfrido Cárdenas Hoffman, de 30 años, fue arrestado mientras se encontraba en tránsito en el aeropuerto internacional de Miami, según ha informado a través de un comunicado la oficina del fiscal estadounidense para Connecticut y el FBI.

   Cárdenas Hoffman hizo 96 llamadas a residentes del área de Newtown, en Connecticut, en los dos días posteriores a que Adam Lanza disparara y matara a 20 niños y seis adultos en la escuela antes de suicidarse en diciembre del 2012, según sostiene la denuncia.

   "Soy Adam Lanza. Voy a matarte. Estás muerto. ¿Me escuchas? Estás muerto", dijo Cárdenas Hoffman en una de las llamadas, según los investigadores. El sospechoso viajaba a México desde Venezuela e hizo una parada de tránsito en Miami, donde fue arrestado y llevado a una corte federal del estado de Florida.

   Funcionarios interrogaron a cuatro de las personas que el hombre llamó desde un número telefónico que se presume pertenece a Cárdenas Hoffman, y todos dijeron que habían recibido llamadas amenazantes, según las denuncias.

   "Amenazar a gente tan vulnerable es condenable y una conducta criminal e inhumana. Además, demandó de manera impropia el uso de recursos de ley en un momento de mucha exigencia", ha explicado en el comunicado la fiscal estadounidense para Connecticut, Deirdre Daly.

   Las llamadas fueron hechas desde un iPod usando un servicio telefónico de Internet y fueron hechas desde Venezuela o redireccionadas desde ahí, según añade la denuncia.

   Cárdenas Hoffman, residente de El Hatillo, Venezuela, fue acusado de transmitir amenazas y se enfrenta a hasta cinco años de prisión y una multa de 250.000 dólares. El jueves debe regresar a la corte para una audiencia de detención.