MADRID, 14 Jul. (EUROPA PRESS) -
El artista ecuatoriano Francisco Velázquez (Manabí 1978), con la colaboración de sus compatriotas los pintores René Sánchez 'Kishor' y Floyd Mena, ha sido encargado de ejecutar una parte importante de la rehabilitación artística del Palacio de Altamira, singular ejemplo de la arquitectura civil madrileña del siglo XVIII.
Las obras de rehabilitación, ya emprendidas por los tres maestros ecuatorianos, se proponen volver a su estado original el único techo con decoraciones neoclásicas del Palacio, que incluye pinturas y esculturas, así como cenefas en alto relieve cubiertas de pan de oro.
Situado en pleno centro de Madrid, a pocos pasos de la Gran Vía madrileña, el Palacio de Altamira es una construcción de estilo neoclásico proyectado por el afamado arquitecto Ventura Rodríguez para el marqués de Astorga y conde de Altamira.
Su construcción comenzó en 1788, pero el proyecto no se llegó a completar en su totalidad, debido, según se dice, a presiones de la Corona, porque el Rey Carlos IV consideraba que su grandiosidad entraba en competencia con al Palacio Real.
Así, sólo se llegó a construir el ala oeste, con una superficie de 1.344 metros cuadrados. En 1997 fue declarado monumento histórico-artístico, aunque actualmente se encuentra deteriorado tras más de una década sin uso.
En 2003 fue adquirido por el Instituto Europeo de Diseño, cuyo objetivo es la formación de profesionales de ámbito internacional en las diversas disciplinas del diseño: la moda, las artes visuales, las relaciones públicas o el marketing.
La rehabilitación se enmarca dentro del Plan de Revitalización del Centro Urbano, gracias a un convenio suscrito entre el Ayuntamiento de Madrid y el Instituto Europeo de Diseño, por el que se permite la rehabilitación del edificio a cambio de que el inmueble pase a formar parte del patrimonio municipal a partir del 30 de junio de 2034.