SANTIAGO DE COMPOSTELA, 19 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Policía Técnica Judicial (PTJ) de Panamá sigue "varias líneas" de investigación sobre el supuesto secuestro el pasado 25 de junio de un empresario de origen gallego en la capital de este país centroamericano y, aunque reconoce que "se sigue sin saber nada" sobre su paradero, reafirma que este caso constituye "una prioridad" para la unidad antisecuestros.
El cónsul de España en Panamá, Ricardo Santos, aseguró a Europa Press que el equipo diplomático español mantiene un contacto "permanente" con la dirección de la PTJ para garantizar que el caso no caiga en el olvido, ya que reconoció su "preocupación" porque "no hay mayores noticias" sobre la desaparición del empresario "casi desde el principio", cuando fue secuestrado hace ya casi un mes.
No obstante, Santos subrayó que el equipo diplomático tiene las garantías de la PTJ de que la desaparición del empresario Humberto Avella constituye "una prioridad" y que están "muy pendientes del caso". Aunque confesó que "hay un gran mutismo" por motivos de seguridad para el desaparecido, puntualizó que "la investigación va bien" y confían en que el caso se resuelva "lo más pronto posible".
Acerca de las afirmaciones de algunos medios de comunicación panameños que han vinculado el secuestro con el robo de un cargamento de droga, la policía no ha confirmado oficialmente al equipo diplomático español esta línea de investigación.
La familia de Humberto Avella, de unos 50 años y casado con una panameña, ha solicitado la máxima privacidad posible. Pese a que lleva 15 años residiendo en Panamá, donde tiene una distribuidora de licores en la Zona Libre, provincia de Colón, y una cantina --bar-- en Calidonia, uzona muy céntrica de la capital donde están ubicadas muchas mueblerías de gallegos, el desaparecido no mantiene relación con la comunidad gallega, que conoció el caso a través de la prensa.
El secuestro de Humberto Avella, originario de un pueblo de la provincia de La Coruña que no ha sido desvelado por motivos de seguridad, es investigado desde el pasado 25 de junio, a raíz de que un conocido recibiese una llamada telefónica en la que se reclamó un rescate para la puesta en libertad del empresario.
Sólo en el último mes en Panamá se han reconocido oficialmente cuatro secuestros. El 20 de enero del año pasado, presuntos guerrilleros colombianos secuestraron en la frontera con Colombia, en la provincia de Darién, a los españoles José Vicente Colastra y su hijo Sergio Colastra, ambos médicos naturistas que se dirigían la fundación Tierra Viva, dedicada a asistir a refugiados colombianos en la frontera panameña, pero fueron puestos en libertad el 6 de abril.