BARCELONA, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
La ONG Veterinarios sin Fronteras denunció hoy que la importación "masiva" de soja transgénica en Cataluña provoca "hambre, pobreza" y "problemas ecológicos" en los países exportadores de Suramérica, como Brasil, Paraguay o Argentina.
Uno de los activistas de la organización, Ferran García, explicó que Cataluña percibe el 60% de la soja que importa España, que, a su vez, es el quinto importador mundial. Un 43% de este transgénico se importa de Argentina, un 34%, de Brasil, y un 23%, de Estados Unidos.
Según García, el 92% de la soja que importa Cataluña se destina a la elaboración de piensos para alimentar a los animales, mayoritariamente cerdos, aunque también vacas y gallinas, por lo que los catalanes consumen la soja "en forma de leche, carne y huevos", concluyó.
García señaló que en los últimos años y con el objetivo de satisfacer las necesidades ganaderas europeas, los países suramericanos han substituido los cultivos de consumo humano, como los cereales y las hortalizas, por la soja.
La activista del grupo Reflexión Rural de Argentina Javiera Rulli, alertó sobre el impacto medioambiental que ha provocado esta transformación en los países productores. Entre otros efectos, apuntó un ritmo del 10% anual de deforestación, así como la contaminación de tierras y agua a causa del alto grado de agrotóxicos que requiere el cultivo de la soja.
Rulli señaló que la excesiva utilización de pesticidas y fertilizantes ha generado numerosos casos de intoxicación en las comunidades rurales que viven cerca de las plantaciones.
También denunció que el monocultivo de soja provoca "hambre y pobreza en los países productores", ya que, en Argentina, por ejemplo, se ha reducido "considerablemente" la disponibilidad de carne y huevos por habitante en los 20 últimos años.
Además, el campesino y miembro del Movimiento Agrario Popular de Paraguay, Jorge Galeano, denunció los excesos que cometen los empresarios con los campesinos para que se vayan de sus tierras y así tengan vía libre para cultivar la soja.
Para mostrarlo, Galeano mencionó un episodio que tuvo lugar el pasado mes de agosto y en el que murieron dos campesinos de la comunidad Tecojoja por resistirse al desalojo que supuestamente les imponían los propietarios de las plantaciones.
El agricultor añadió que en otras ocasiones, los empresarios han intentado expulsar a las comunidades campesinas fumigándolas con agrotóxicos y exponiéndolas a un alto riesgo de contraer enfermedades graves como el cáncer o el lupus.
Desde Veterinarios sin Fronteras se pretende concienciar a las autoridades y a la sociedad catalanas sobre las consecuencias de nuestra organización ganadera.
La ONG celebrará el próximo miércoles un Tribunal Popular sobre el monocultivo de la soja en la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) en el que participarán catedráticos, juristas y otros expertos en el tema. La organización llevará el veredicto del jurado al Parlamento europeo, a la Generalitat y al Gobierno español.