MONTEVIDEO, 16 Oct. (Notimérica) -
El antiguo preso de Guantánamo de origen sirio y residente en Uruguay Jihad Diyab ha aceptado ingerir líquidos, después de dos meses en huelga de hambre, en protesta por el trato que, según él, ha recibido por parte del Ejecutivo iberoamericano y por la falta de cumplimiento de la promesa de reunirse con su familia.
Varios allegados a Diyab han señalado a través de las redes sociales que Diyab ha decidido aliviar la huelga de hambre por "una pequeña apertura" a la respuesta parcial de la Comisión de Refugiados uruguaya a sus solicitudes de enviar a cuatro países --Líbano, Turquía, Catar y Venezuela-- una carta en la que figure su situación con el fin de que pueda reunirse allí con su mujer e hijos.
A pesar de que el Gobierno uruguayo ha señalado en varias ocasiones que su familia puede acudir a visitarle --con los gastos de viaje y residencia sufragados por el Estado-- Diyab siempre se ha mostrado más favorable a la idea de residir con su familia en otro país, preferiblemente musulmán.
"Por este motivo, y atendiendo a la solicitud constante de quienes estamos cercanos, levanta la huelga seca el día de hoy, y comienza a hidratarse", ha señalado la página de Facebok 'Vigilia por Jihad Diyab'.
No obstante, Diyab se encontraría en un grave estado de salud, tras más de 60 días en huelga de hambre y en huelga seca desde el pasado 3 de octubre. El 10 de octubre tuvo que ser hidratado por personal médico mientras que se encontraba inconsciente.
Diyab llegó a Uruguay en el año 2014 junto a otros cinco expresos de Guantánamo, donde había permanecido encarcelado por su presunta vinculación con el grupo terrorista Al Qaeda. Desde entonces, ha reclamado su traslado a otro país y reunirse con su familia, que permanece en Turquía.