Actualizado 17/09/2016 12:41

Falta de acceso a servicio sanitario de calidad frena el descenso de la mortalidad materna

Riesgo en el embarazo
PIXABAY

   BOGOTÁ, 17 Sep. (Thomson Reuters Foundation/EP) -

   La falta de acceso a un servicio sanitario de calidad para mujeres embarazadas está frustrando la posibilidad de erradicar la mortalidad materna en el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) establecidos de cara a 2030.

   El acuerdo firmado en 2015 por los miembros de la ONU incluía la reducción de la tasa de mortalidad de las mujeres durante el embarazo y el parto a menos de 70 muertes por cada 100.000 nacimientos. Aunque la defunción materna ha disminuido casi un 50 por ciento desde 1990, la lucha contra este tipo de muertes se está viendo frustrada.

   En 2015, el número de muertes era de 210 por cada 100.000 partos, lo que supone 169 muertes menos respecto a las cifras registradas a principios de los años 90. Sin embargo, para alcanzar lo establecido en los ODS, el número de muertes por maternidad debería descender al menos un 70 por ciento.

   Al menos 53 millones de mujeres en situación de pobreza no reciben asistencia médica durante el parto, según datos de un estudio publicado por la revista médica británica 'The Lancet', que señala que la mayoría de mujeres que mueren durante los embarazos y partos son adolescentes, solteras, inmigrantes y refugiadas.

   "La brecha de mortalidad materna en todos los países aumenta cuando nos fijamos en las mujeres más vulnerables", ha señalado Wendy Graham, una de las principales autoras del estudio. "Esta realidad supone un desafío para lograr que nadie se quede atrás y cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible", ha añadido.

   La mayoría de las defunciones tienen lugar en países en vías de desarrollo y son causadas principalmente por los abortos y las infecciones. La brecha entre los países con la mayor y menor mortalidad materna se duplicó entre 1990 y 2013, una diferencia que también existe a nivel interno en países desarrollados, como Estados Unidos.

   Según el estudio, las mujeres neoyorquinas afroamericanas tienen el doble de posibilidades de morir durante el embarazo, el parto o en las semanas posteriores. Para poder cumplir con los objetivos establecidos por la ONU son necesarios unos 18 millones de médicos adicionales, especialmente en zonas del sur de África. Según 'The Lancet', las instalaciones médicas en muchos países carecen de agua, electricidad o equipamiento suficiente para hacer frente a la demanda.