Actualizado 19/04/2018 18:14

Fe y devoción por San Expedito en Argentina, el santo de las causas urgentes

San Expedito
WIKIPEDIA

   BUENOS AIRES, 19 Abr. (Notimérica) -

   Como cada año, la parroquia Nuestra Señora de Balvanera y santuario de San Expedito, ubicada en Bartolomé Mitre (Buenos Aires, Argentina), recibirá este jueves a miles de fieles que con el lema "amemos con obras como lo hizo San Expedito", llegarán al barrio de Balvanera para pedir la bendición de las causas justas y urgentes.

   Desde 2004, en el templo parroquial de Nuestra Señora de Balvanera, se venera una antigua imagen de San Expedito y se rinde culto al santo de las causas justas y urgentes, con gran convocatoria de fieles. El 19 de abril del año pasado llegaron miles de fieles durante todo el día. La devoción crece cada año, y en muchas partes del país y de América latina, los peregrinos acuden masivamente a los lugares donde se venera su imagen.

¿QUIEN FUE SAN EXPEDITO?

   Según cuenta la leyenda, Expedito provenía de una familia patricia, siguió la carrera militar y llegó a ser comandante de las Legiones Romanas. Más tarde, fue designado en Melitene, la antigua Capadocia (hoy Turquía).

   La historia calcula que falleció en el 303 d.C., en Malatya, mientras que fue canonizado en 1671 por el papa Clemente X. En el momento de su conversión, tocado por la gracia de Dios, resuelve cambiar su vida y convertirse al cristianismo, ya que lo había conmovido profundamente la actitud de los cristianos al enfrentar la muerte.

   Tras una batalla decidió convertirse al cristianismo, pero cuenta la tradición que ante su inminente decisión, se le apareció un cuervo que trató de persuadirlo al grito de "cras", que significa mañana en latín. Al instante, reaccionó, respondiendo: "hodie", cuyo significado es hoy y agregando: "No lo dejaré para mañana, hoy seré cristiano"; pisoteó al cuervo, dejando con ese gesto inquebrantable su opción de fe.

   Junto a otros soldados conversos murió mártir en la persecución del emperador Diocleciano, en el año 303. La causa más justa y urgente por la cual intercede es por nuestra propia "conversión".