BRASILIA, 14 Mar. (Notimérica) -
Según avanzan las horas, se van conociendo más detalles sobre el ataque que este miércoles sufrió la escuela 'Profesor Raul Brasil' de Suzano (Sao Paulo) y dejó diez víctimas mortales, entre ellos cinco niños, además de los dos agresores, que se suicidaron tras la masacre.
Este jueves se ha conocido que un grupo de cocineras salvó la vida de al menos cincuenta estudiantes al encerrarlos en la cocina de la escuela y bloquear la puerta para que los atacantes no pudieran acceder.
"Estábamos sirviendo comida y empezaron los tiros, los niños entraron en pánico, abrimos la cocina y empezamos a colocar al mayor número de niños dentro, cerramos todo y les pedimos que se acostaran en el suelo", ha asegurado al portal de noticias 'G1' Silmara Cristina Silva, una de las trabajadoras de la cocina del centro. "Fue muy desesperante, había muchos tiros y mucho pánico", ha reconocido.
Según la empleada, de 54 años, consiguieron meter en la cocina a unos cincuenta niños y, al percibir que los agresores estaban cerca, bloquearon la entrada poniendo delante de ella diferentes electrodomésticos, tal y como recoge 'Sputnik'.
"Yo arrastré el refrigerador y el congelador para hacer una barricada y nos pusimos detrás, a la mesa le dimos la vuelta e hicimos un escudo para proteger a los niños", ha explicado Silva.
Este miércoles, a primera hora de la mañana, dos jóvenes de 17 y 25 años, antiguos alumnos del centro de estudios, irrumpieron en la escuela 'Raul Brasil' de la localidad de Suzano, en Sao Paulo, y comenzaron a disparar indiscriminadamente. Tras asesinar a dos profesoras y siete alumnos de entre 15 y 16 años se suicidaron cuando la Policía llegó al lugar.
La décima víctima de los dos agresores fue el dueño de un centro de autolavado, a quien previamente habían asesinado a tiros para robarle el coche con el que se presentaron en la escuela, según informa 'BBC Mundo'.