CIUDAD DE GUATEMALA, 9 Nov. (EUROPA PRESS) -
Un total de 16 personas murieron anoche calcinadas en el interior de un autobús que circulaba por una solitaria carretera de la región guatemalteca de Zacapa. Las autoridades investigan el suceso, que pudo ser intencionado, según los indicios hallados en el lugar y la opinión de los servicios de emergencia.
El autobús, sin placas de matrícula, transportaba, según las primeras informaciones, a trabajadores de las plantaciones de melones, una información que no ha sido aún confirmada, informó el diario 'Prensa Libre'.
Anoche, personas que transitaban por la citada carretera llamaron a la Policía Nacional Civil y a los bomberos, quienes constataron al llegar al lugar que el autobús estaba en llamas, por lo que trabajaron durante 25 minutos para sofocar el incendio, y al ingresar al mismo se pudo comprobar que ninguna de las personas había sobrevivido al incendio.
Los bomberos dijeron que les causaba sorpresa que ninguno de los fallecidos intentase escapar del incendio y que todos hubieran muerto en sus asientos y que la puerta trasera estuviera abierta. Se cree que las personas estaban bajo los efectos de alguna droga o que ya estaban muertas antes del incendio del autobús.
Fiscales del Ministerio Público se presentaron en el lugar para iniciar las investigaciones, recopilaron las primeras evidencias y acordonaron el área para posteriormente efectuar un peritaje para determinar lo que pudo haber sucedido en el lugar.
Los fiscales ordenaron la extracción de los cuerpos y su traslado al depósito de cadáveres del Instituto Nacional de Ciencias Forenses de la Ciudad de Guatemala para la realización de una serie de exámenes.
Al lugar acudieron una gran cantidad de curiosos, pero estos indicaron que el autobús no era del lugar y se cree que no son trabajadores de las plantaciones de melones. Ninguna persona llegó al lugar para intentar identificar a las víctimas como posibles familiares.
Según los indicios hallados en el lugar, el autobús fue rociado con gasolina y se esparció combustible hasta unos cinco metros de distancia, desde donde se prendió el fuego.
Ninguno de los agentes del Ministerio Público y de la Policía quiso dar una versión preliminar sobre las causas del hecho y no aventuraron ninguna hipótesis. La carretera donde ocurrió el hecho es una ruta paralela a la carretera principal, un lugar muy solitario durante la noche, ya que sólo la utilizan las empresas meloneras para transportar mercancía.