BRASILIA, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de 18 países latinoamericanos firmó este viernes la Declaración de Brasilia sobre la protección de refugiados y apátridas en América Latina, por la que se comprometen a aumentar los esfuerzos para proteger a personas desplazadas y apátridas, según informó en un comunicado la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
El documento ha sido suscrito por Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, Guatemala, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela y ha contado con la supervisión de Estados Unidos y Canadá, que participaron como observadores en la reunión celebrada en la capital de Brasil.
Aprobado en una reunión de los responsables de los 18 países latinoamericanos en la sede del Ministerio de Justicia brasileño, este documento supone "una declaración histórica", según el Alto Comisionado para los Refugiados, Antonio Guterres.
El responsable de ACNUR confío en que el acuerdo permita "una mejor protección de los refugiados y de las personas desplazadas en todo el continente americano" y también una aceleración de "los esfuerzos mundiales" para mejorar "la situación de los desplazados" y "poner fin al sufrimiento de los apátridas".
"Animo a los Gobiernos de otros países a tomar nota de la pionera declaración que hemos tomado en Latinoamérica", indicó el Alto Comisionado de la ONU, antes de incidir en que el documento representa "un valioso precedente".
La Declaración de Brasilia contempla el principio de la no devolución de refugiados y establece que no se penalice por las entradas ilegales en países.
Asimismo, el documento insta a los Estados a que adopten mecanismos para hacer frente a las nuevas situaciones existentes que no se discutieron en la Convención para los refugiados de Naciones Unidas en 1951.
El texto reafirma gran parte de los compromisos del Plan de Acción de México, acordado en 2004 y que tiene por objeto proteger a los refugiados de América Latina.
El director de las Políticas de Protección de los Refugiados de ACNUR, Volker Türk, destacó que aún quedan muchos retos por cumplir como la urbanización, acabar con la violencia relacionada con pandillas, la migración mixta y los desplazados internos y los apátridas.