Publicado 16/03/2016 14:15

El impacto de 'El niño' disminuirá este mes de marzo

A resident fills a container with water taken from a partially dried-up reservoi
OSWALDO RIVAS / REUTERS

   LIMA, 16 Mar. (Notimérica) -

   El fenómeno de 'El niño' ha pasado de intensidad fuerte en enero y febrero a moderado este mes de marzo, y es probable que las temperaturas de la zona norte empiecen a normalizarse en abril, según el Servicio Nacional de Perú de Meteorología e Hidrología (Senamhi), en declaraciones recogidas por la agencia 'Andina'.

   "Otra onda kelvin cálida ya no viene, ahora se espera una onda más fría con lo cual prevemos que para fines de marzo la temperatura del mar esté en descenso", manifestó la meteoróloga del área de Pronóstico del Senamhi, Raquel Loayza, a dicho medio.

   La especialista anunció que se espera un otoño normal sin fuertes lluvias, las mismas que desaparecerían después de la primera semana de abril.

"Los sistemas atmosféricos no indican que ocurran lluvias fuertes en gran magnitud como a inicios de marzo, al menos esta semana. Solo se están presentando lluvias localizadas", aseveró.

   Al respecto, agregó que las lluvias registradas a principios de marzo en Tumbes, ubicado al norte del país, son precipitaciones comunes de la estación, por lo que la población y las autoridades ya están acostumbradas.

   En este sentido, la experta puso de ejemplo al pasado año, ya que, "sin el fenómeno 'El niño' se presentaron igual estas lluvias". "Es algo usual", añadió.

   No obstante, Loayza afirmó que las condiciones para que ocurran lluvias fuertes siguen presentes, puesto que las temperaturas mínimas y máximas del mar se mantienen por encima de lo normal.

"Nosotros no bajamos la guardia porque todavía hay condiciones para que se produzcan lluvias fuertes. Todavía tenemos un mar cálido, por lo que estamos monitoreando frecuentemente para tener alerta a las autoridades y a la población", declaró.

   Por último, la experta subrayó que esta temporada 'El Niño' ha amenazado en varias ocasiones con desatar grandes precipitaciones que, finalmente, no "estallaban", algo que está muy relacionado con el calentamiento global.

   "Llegamos a mandar alertas de lluvias fuertes y al final nada de nada. Esta alteración es parte del calentamiento global, que también hace que la frecuencia de 15 años entre Niño y Niño se reduzca", concluyó.