Actualizado 22/11/2015 16:48

Irán condena al corresponsal en Teherán del 'Washington Post' por espionaje y propaganda

   MADRID, 22 Nov. (Notimérica/EP) -

   Las autoridades judiciales de Teherán han anunciado hoy que el periodista iraní-estadounidense Jason Rezaian, jefe de la oficina en Teherán del diario 'Washington Post', fue condenado el pasado 11 de octubre a una pena no especificada de cárcel por espionaje y propaganda, cargos por los que permanecía detenido desde julio de 2014.

   "En la sentencia de Jason Rezaian figura el cumplimiento de una condena en la cárcel pero no puedo dar detalles", ha declarado en un primer momento el portavoz de la Judicatura iraní, Gholamhossein Mohseni Ejei a la agencia de noticias oficial iraní IRNA.

   Fuentes oficiales iraníes precisaron poco después, bajo el anonimato y "tras mucha especulación" que Rezaian ha sido condenado por cuatro cargos, entre ellos espionaje y "propaganda contra la República Islámica de Irán", de acuerdo con el medio.

   El caso de Rezaian, que tiene 20 días para apelar la sentencia, afloró en el marco de las negociaciones nucleares entre el Grupo 5+1 --formado por Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Alemanoa, Rusia y China-- e Irán, pero sin resultados aparentes. Tanto la familia como el diario para el que trabaja han calificado los cargos de "completamente absurdos".

'WASHINGTON POST' CONDENA LA ENCARCELACIÓN

   El diario estadounidense 'The Washington Post' ha repudiado la condena de cárcel dictada por Irán en octubre, y conocida este domingo, al jefe de su oficina en Teherán por cargos de espionaje y propaganda contra la República Islámica que el medio norteamericano ha considerado simple y llanamente como una "farsa".

   "Somos conscientes de las noticias que aparecen en los medios iraníes pero no tenemos más información en este momento", ha explicado a los lectores el editor de la sección internacional del periódico, Douglas Jehl.

   El rotativo ha reaccionado con indignación. "Cada día que Jason pasa en prisión es una injusticia", ha rechazado Jehl. "No ha hecho nada malo. Aunque lleva 487 días entre rejas, Irán todavía no ha sido capaz de presentar pruebas de comportamiento delictivo alguno. Su juicio y su sentencia han sido una farsa, y debería ser liberado inmediatamente", ha concluido.