BRASILIA, 3 Feb. (Notimérica) -
La cirugía estética ha abierto un nuevo debate en Brasil, el país en el que se aprecia de forma especial la belleza, pero no cualquier cirugía, sino aquella destinada a mejorar la apariencia de los genitales.
Los cirujanos plásticos brasileños, famosos por ser unos de los primeros en llevar a cabo operaciones como el levantamiento de glúteo transfiriendo grasa de otras partes del cuerpo, han empezado a observar como la demanda de labioplastias, una cirugía en la que se adelgazan o se rellenan los labios vaginales, no ha dejado de aumentar.
Según datos de la Sociedad Internacional de Cirugía Plástica Estética (ISAPS), en 2016 las mujeres que se sometieron a esta cirugía aumentaron en un 80 por ciento, con un total de 23.155 operaciones, la mayor cifra del mundo.
Los críticos con este tipo de cirugías plásticas apuntan a que es preocupante como la pornografía deforma la autopercepción de los cuerpos, hasta el punto de aspirar a la perfección genital, algo conocido como "vaginas de diseño".
Por otro lado, los cirujanos defienden estas prácticas como una nueva forma de empoderamiento femenino.
La cirujana plástica colombiana que lleva a cabo labioplastias, Lina Triana, ha afirmado que "las mujeres latinas viven en una cultura machista: él es quien gobierna en la oficina, en el hogar, en la vida sexual. Ahora como mujeres (...) somos líderes en el hogar y en el trabajo y queremos serlo en nuestras vidas sexuales".
Triana ha explicado que esta práctica surgió en la década de los 70 con el fin de eliminar el exceso de tejido en los labios menores que podía ser doloroso a la hora de mantener relaciones sexuales o hacer deporte.
Esta cirugía pasó a convertirse en un asunto estético y su demanda se disparó un 45 por ciento en todo el mundo entre 2015 y 2016, siendo la cirugía estética de más rápido crecimiento.
En Brasil, esta es una práctica en aumento, pero que aún es superada por otras cirugías plásticas como la liposucción o los implantes de silicona, con más de 200.000 intervenciones cada uno en 2016, según ha publicado 'La Nación'.
La profesora de estudios de género de la Universidad Federal de Bahía, Darlane Andrade, ha declarado que las mujeres brasileñas se enfrentan a férreos ideales de belleza muy sexualizados.
"Es la cultura de la mujer brasileña siendo sexualizada, que debe tener un cuerpo y genitales que sean sexualmente atractivos", ha declarado la investigadora, quien se muestra contraria a las tesis que asocian estas prácticas con el empoderamiento femenino, asegurando que, si la mujer intenta complacer al hombre "¿qué tipo de empoderamiento es ese?".