MADRID, 29 May. (Notimérica/EP) -
Los países latinoamericanos y caribeños se han propuesto nuevas metas denominadas '90-90-90' para controlar el VIH/Sida hasta el año 2020. Las propuestas serán recogidas durante el Primer Foro Latinoamericano y del Caribe sobre el Continuo de Atención del VIH que se desarrolla hasta el 28 de mayo en la ciudad de México. Entre las medidas adoptadas figuran aumentar el porcentaje de personas con VIH que conozcan su diagnóstico, personas bajo tratamiento antirretroviral y con carga viral indetectable, todo con el objetivo de combatir el VIH-Sida.
Las nuevas metas planteadas que deben su nombre a logros cuantitativos que esperan lograr consisten en el compromiso de los países de la región de reducir al 90 por ciento la proporción de personas con VIH que conocen su diagnóstico, a incrementar al 90 por ciento aquellas bajo tratamiento antirretroviral y que el 90 por ciento de las personas bajo tratamiento tenga carga viral suprimida, según un comunicado en el sitio web de ONUSIDA.
El objetivo de la medida es reducir las nuevas infecciones por VIH para mejorar la calidad de vida de las personas con VIH y disminuir la mortalidad por el sida.
Las nuevas metas son un paso más hacia el control de la epidemia de VIH/sida, "si queremos que más personas estén bajo tratamiento y con una carga viral indetectable, es esencial que conozcan su diagnóstico e inicien el tratamiento en forma temprana", ha dicho el jefe de la unidad de VIH, Hepatitis, Tuberculosis e Infecciones de Transmisión Sexual de la OPS/OMS, Massimo Ghidinelli.
A criterio de del director Regional de ONUSIDA para América Latina, César Núñez, "la expansión del diagnóstico y tratamiento tempranos combina los beneficios clínicos individuales del tratamiento temprano con los beneficios de prevención de la transmisión a nivel de población".
En 2012, en Latinoamérica y el Caribe, 1.8 millones de personas vivían con VIH y se produjeron cerca de 98.000 nuevas infecciones, según datos de ONUSIDA.
El virus de la Inmunodeficiencia Adquirida es la que produce el sida y tiende a debilitar el organismo a tal nivel que cualquier otra infecciones como un resfrío u otras infecciones oportunistas tales como la Tuberculosis o neumonía pueden llevar al portador del virus a la muerte.