Actualizado 12/02/2014 12:20

Lugar más frío del Universo estará en la Estación Espacial Internacional

Estación espacial
Foto: NASA

MADRID, 12 Feb. (EUROPA PRESS) -

   Investigadores de la NASA están planeando crear el lugar más frío del universo conocido dentro de la Estación Espacial Internacional. "Vamos a estudiar la materia a temperaturas mucho más frías que las que se encuentran en forma natural", dijo Rob Thompson, del Laboratorio Jet Propulsion de la NASA.

   Él es el científico del proyecto Cold Atom Lab de la NASA, un 'refrigerador' atómico programado para ser lanzado a la ISS en 2016. "Nuestro objetivo es bajar la temperatura efectivamente hasta 100 pico-Kelvin."

   100 pico-Kelvin es sólo una diez mil millonésima de grado sobre el cero absoluto, donde, en teoría, toda la actividad térmica de los átomos se detiene. A temperaturas tan bajas, los conceptos ordinarios de sólido, líquido y gaseoso ya no son relevantes. Los átomos que interactúan justo por encima del umbral de energía cero crean nuevas formas de materia que son esencialmente cuánticas.

   La mecánica cuántica es una rama de la física que describe las extrañas reglas de la luz y la materia a escalas atómicas. En ese ámbito, la materia puede estar en dos lugares a la vez, los objetos se comportan como partículas y ondas, y nada es seguro: en el mundo cuántico rige la probabilidad.

   Es en este extraño reino que los investigadores que utilizan el Lab Cold Atom se zambullirán. "Vamos a comenzar", dice Thompson, "con el estudio de los condensados de Bose-Einstein."

   En 1995, los investigadores descubrieron que si se toman unos millones de átomos de rubidio y se enfrían cerca del cero absoluto, se fusionan en una sola onda de materia. El truco funcionó con el sodio, también.

   En 2001, Eric Cornell, del Instituto Nacional de Estándares y Tecnología y Carl Wieman, de la Universidad de Colorado, compartieron el Premio Nobel con Wolfgang Ketterle del MIT por su descubrimiento independiente de estos condensados, que Albert Einstein y Satyendra Bose habían pronosticado a principios del siglo 20.

   Si se crean dos condensados de Bose-Einstein (CBE) y los juntas, no se mezclan como un gas ordinario. En cambio, pueden "interferir" como las ondas: delgadas capas paralelas de materia son separadas por finas capas de espacio vacío.