Actualizado 28/09/2009 01:36

Malestar en Francia y Polonia tras la detención de Polanski

PARÍS, 27 Sep. (Reuters/EP) -

La élite política francesa cerró filas hoy en defensa de uno de los iconos del cine francés, el franco-polaco Roman Polanski, detenido en Suiza a requerimiento de una orden de captura emitida hace treinta años por Estados Unidos.

Artistas y cineastas reivindicaron la puesta en libertad de Polanski, de 76 años de edad, perseguido por mantener relaciones sexuales con una niña de 13 años en 1977. Las autoridades suizas detuvieron a Polanski ayer sábado a su llegada a Zúrich, donde iba a ser premiado por su carrera artística en el Festival de Cine de Zúrich.

"Creo que es horrible y totalmente injusto", afirmó el ministro de cultura francés, Frederic Mitterrand. "Así como hay una América generosa y que nos gusta, también hay una américa aterradora, y esa América acaba de revelar su rostro", agregó.

Mitterrand aseguró que el presidente galo, Nicolas Sarkozy, sigue el caso con interés y que espera una pronta puesta en libertad de Polanski. El ministro de Asuntos Exteriores, Bernard Kouchner, indicó, por su parte, que ya ha trasladado su preocupación a su homólogo suizo.

Polanski tiene la ciudadanía francesa y está casado con la cantante y actriz francesa Emmanuelle Seigner. Además, ha pasado la mayor parte de su vida en Francia, tras huir de Estados Unidos en 1978, aunque viaja con normalidad a países en los que se supone que no hay amenazas de extradición.

Robert Harris, novelista británico que lleva tres años colaborando con Polanski en dos guiones para el cine, también manifestó su malestar por el arresto. "Estoy sorprendido de que un hombre de 76 años, sea o no conocido, sea tratado de este modo", explicó. Además, Harris reveló que Polanski visita frecuentemente Suiza e incluso posee una vivienda en la turística localidad de Gstaad. "Es difícil no pensar que esta dura acción no tenga algún tipo de motivación política", dijo.

Aunque nacido en París, Polanski se mudó con su familia, judía, a Polonia poco antes de la Segunda Guerra Mundial. Su madre murió en un campo de concentración Nazi, pero Roman logró escapar y pasó su juventud en Polonia antes de trasladarse de nuevo hacia el oeste.

El ministro de Exteriores polaco, Radoslaw Sikorski, aseguró que el Gobierno apelará directamente a Estados Unidos. "Estoy estudiando contactar con las autoridades estadounidenses para que el presidente anuncie una medida de clemencia que cierre la cuestión de una vez por todas", afirmó Sikorski en declaraciones recogidas por la agencia de noticias PAP.

También la asociación de cineastas polacos ha defendido a Polanski. "No entendemos por qué los suizos invitaron a Polanski a un festival de cine para recibir el premio a toda una carrera y después lo detienen", indicó el presidente de la organización, Jacek Bromski. "La consideramos una situación escandalosa, un ejemplo de incomprensible exceso de celo", dijo.