Publicado 25/10/2019 17:57

Más de 180 obispos votarán mañana el documento del Sínodo Amazónico con temas como la ordenación de ancianos casados

Las mujeres participantes no tienen derecho a voto pero se han autodenominado "madres sinodales"

ROMA, 25 Oct. (EUROPA PRESS) -

Los más de 180 obispos que desde el pasado 3 de octubre discuten en el Vaticano sobre las problemáticas de la región de la Amazonía votarán este sábado un documento final del Sínodo que después será entregado al Papa para su aprobación. Entre los temas sobre los que tendrán que votar se encuentran: la ordenación de ancianos casados para paliar la falta de sacerdotes en la región, la concesión de ministerios para mujeres o la institución de un rito litúrgico distinto en la Amazonía con símbolos propios.

Estas son algunas de las propuestas que figuran en los informes presentados por los 12 círculos menores de obispos y otros participantes divididos por lenguas. La praxis de la asamblea sinodal pasa por la votación punto por punto del texto, no vinculante, que después será entregado al Papa para su valoración.

La asamblea sinodal ha puesto en el centro durante tres semanas el territorio amazónico que atraviesa nueve países y los problemas de este pulmón del planeta, donde la deforestación --que arrasa decenas de hectáreas de árboles cada año-- y la explotación económica de la selva por parte de las industrias amenazan su supervivencia y la de sus habitantes.

El lema del Sínodo es 'Nuevos caminos para la Iglesia y la ecología integral' y es la primera vez que el Papa dedica una asamblea eclesial a un territorio.

LIDERAZGO PARA LAS MUJERES

En este Sínodo se ha abierto la puerta a debates sobre temas que nunca antes habían estado en la mesa de los obispos, por ejemplo, el papel de la mujer en la Iglesia católica. El Istrumentum Laboris, el documento que ha guiado a los prelados reconoce que "en el campo eclesial la presencia femenina en las comunidades no es siempre valorada", y se propone de hecho que tengan garantizado su liderazgo y espacios cada vez más amplios y relevantes en áreas formativas.

A pesar de esto, el documento no habla en ningún momento de "diaconado femenino", debido a que aún se encuentra en estudio dentro de la comisión encargada para ese análisis por el Papa Francisco en 2016.

Además, aunque el Sínodo ha contado con 35 mujeres, el mayor número nunca visto en una reunión de obispos, 2 invitadas especiales, 4 expertas (entre las cuales, 2 monjas) y 29 auditoras (de las cuales, 18 monjas), ninguna de ellas podrá votar el documento final.

A la luz de este evento, un grupo de mujeres católicas levantó la voz para exigir al Papa y a los obispos plena igualdad en la Iglesia. "Hay 180 padres sinodales con derecho a voto, y ninguno es mujer. ¿Qué es lo que está perdiendo nuestra iglesia sin la experiencia, habilidades, talentos y dones de la mitad de sus miembros?", señaló en conversación Europa Press Stephanie Lorenzo, directora de comunicaciones de Voices of Faith (Voces de Fe), una de las asociaciones feministas más activas dentro de la Iglesia católica.

Precisamente, sobre el papel de la mujer en la Iglesia, la religiosa Alba Teresa Cediel Castillo, de las Misioneras de la Madre Laura, presente en la Amazonía y participante del Sínodo aseguró durante una rueda de prensa que ellas ya bautizan, son testigos del amor cuando una pareja se quiere casar e incluso escuchan confesión aunque no puedan dar la absolución, en la Amazonía.

Además, este viernes, la monja ecuatoriana Inés Azucena Zambrano, de las Hermanas Misioneras de María Inmaculada y de Santa Catalina de Siena, que sirve en Colombia, ha indicado que las mujeres que han participado en el Sínodo se han autodenominado "madres sinodales", en referencia al término que se aplica a los obispos participantes en el Sínodo (padres sinodales).

VOCES DISCREPANTES

También la posibilidad de eliminar el celibato en algunos casos ha causado las voces discrepantes ante el planteamiento del Sínodo, incluso de cardenales de la Curia Romana. El prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, el cardenal africano Robert Sarah, aseguró que sería "desdeñoso y humillante" ordenar sacerdotes casados para solventar la falta de vocaciones en la Amazonía.

"Si en la Amazonía faltan sacerdotes, estoy convencido de que la situación no se resolverá ordenando a hombres casados, a viri probati que no han sido llamados por Dios al sacerdocio, sino a la vida conyugal, para expresar la prefiguración de la unión de Cristo con la Iglesia", señaló en el libro 'Se acerca la tarde y el día casi ha terminado' publicado por la editorial Palabra en España.

A su juicio, "si el sínodo de la Amazonía tomara decisiones en este sentido, rompería definitivamente con la tradición de la Iglesia latina". "No me cabe duda de que lo que se pretende es satisfacer urgencias y necesidades", agregó en este sentido.

Ante las tensiones que han rodeado la asamblea sinodal, sobre todo en temas polémicos como la inculturación de la Iglesia en la Amazonía, la inclusión de excepciones al celibato, o la concesión de ministerios a la mujer, el Papa ha sido claro. En la audiencia pública del pasado miércoles, pidió a los más de 180 obispos que "superen las cerrazones y las tensiones" porque "la Iglesia no es una fortaleza inexpugnable, sino una tienda capaz de agrandar su espacio para dar su acceso a todos".