Publicado 10/11/2015 13:36

Medio oficial cubano critica los viajes del hijo de Fidel Castro

Antonio castro hijo fidel castro
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   LA HABANA, 10 Nov. (Notimérica) -

   Hace unas semanas, la publicación de un artículo en el semanario oficialista cubano 'Tribunal de La Habana', bajo el título 'Los viajes de Gulliver junior', hacía una crítica a la vida del hijo de Fidel Castro, Antonio Castro Soto del Valle.

   La pieza pilló de sorpresa en la isla, donde los medios del país no aceptan comentarios negativos sobre la familia Castro y, menos aún, cuando se trata de rumores.

   A pesar de esto, diversos medios se han hecho eco del supuesto alto nivel de vida del hijo de Castro, gracias a numerosas imágenes colgadas en Youtube y difundidas a través de internet, donde se le puede ver en países como Estados Unidos o Turquía.

   Estas fotografías han generado una gran indignación entre la población cubana, cuyo nivel de vida dista mucho del que tiene uno de los hijos de Castro.

"Gracias a su padre, Gulliver junior viaja bastante seguido. Se le ve de gigante disfrutando en costas del Mediterráneo, o de enano aventurero sin problema en su vida, en su visa", comienza el artículo de Alexánder R. Ricardo.

   A través de un lenguaje críptico en el que no faltan las metáforas, el semanario narra las supuestas peripecias de Castro junior, quien no ostenta ningún cargo oficial en la actualidad.

   "Navegar en la flota de papá es un privilegio hereditario", agrega el escritor, a la vez que compara su situación con la del resto de los cubanos: "Mientras transita por mares calmados, allá en su tierra, otros marineros sólo ven pasar las gaviotas", menciona.

   Todo un grito de protesta contra los ostentosos viajes de Castro Soto del Valle que, en la Cuba de la dinastía Castro, no podría haber sido más directa.

   "Vuelve a levar el ancla, esta vez parte al norte, donde la frialdad del clima lo distanciaba tiempo atrás", escribe R. Ricardo, refiriéndose a su último viaje a Estados Unidos. "Está bien abrigado y rodeado por secuaces. Abre el mapa y señala el destino. Mira a las estrellas en busca de buenos augurios, porque cuando niño nunca aprendió a nadar", finaliza el artículo.