Actualizado 16/10/2012 06:46

México/EEUU.-La familia del joven mexicano muerto a manos de la Guardia Fronteriza de EEUU presentará una demanda civil


MÉXICO DF, 16 Oct. (Reuters/EP) -

La familia del mexicano de 16 años de edad que falleció la semana pasada tras recibir varios disparos de la Guardia Fronteriza de Estados Unidos va a presentar una demanda civil por uso excesivo de la fuerza, según han informado este lunes a Reuters las autoridades del país iberoamericano.

El abogado del Ministerio Público de la ciudad de Nogales Manuel Íñiguez López ha explicado que la familia del fallecido intentará que sancionen a los agentes estadounidenses por uso excesivo de la fuerza, ya que realizaron hasta siete disparos contra la víctima.

De forma complementaria, Íñiguez López ha indicado que la familia solicitará una indemnización a la Guardia Fronteriza, aunque, de momento, no ha especificado la cantidad de dinero. "Se van a basar en la edad del chico y en los ingresos que ya no recibirá", ha dicho.

Todo comenzó alrededor de la medianoche del pasado miércoles, cuando la Guardia Fronteriza detectó que un grupo de jóvenes estaba intentando introducir varios paquetes de droga desde el estado mexicano de Sonora al estadounidense de Arizona.

Al parecer, los jóvenes mexicanos consiguieron cruzar la línea limítrofe hacia Estados Unidos, pero al darse cuenta de que la Guardia Fronteriza había descubierto su mercancía emprendieron la huida hacia el país iberoamericano.

Una vez en el lado mexicano, los jóvenes comenzaron a tirar piedras contra los agentes estadounidenses, que les pidieron que pararán, pero a pesar de ello continuaron, por lo que los uniformados abrieron fuego, según la Guardia Fronteriza.

Como consecuencia de ello, José Antonio Elena Rodríguez, de 16 años de edad, murió, mientras que otro joven mexicano resultó herido, sin que haya trascendido la gravedad de sus lesiones, según informó el diario 'El Universal'.

La Guardia Fronteriza ha reconocido en un comunicado el suceso. Tanto la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) de Estados Unidos, como la Procuraduría General de Justicia de Sonora han comenzado las pesquisas.

Se trata de la tercera persona que muere en territorio mexicano desde el pasado mes de julio por disparos de miembros de la Guardia Fronteriza, que en todos los casos han sostenido que sus agentes fueron atacados con piedras por las víctimas.