MÉXICO DF, 8 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Ejército mexicano comenzó este jueves a retirarse de Ciudad Juárez, en el estado de Chihuahua, en el norte de México, donde el control de la seguridad pasará ahora a manos de la Policía Federal a través de la Secretaria de Seguridad Publica Federal (SSP) que intentará reducir la alta tasa de homicidios en esa violenta localidad.
El nuevo modelo de seguridad implica el despliegue de efectivos tanto por aire como por tierra, así como el refuerzo de las labores de Inteligencia e investigación, según informó el coordinador general de la SSP, Facundo Rosas Rosas, sin precisar cuántos militares se retirarán de la zona.
Unos 5.000 policías serán desplegados en Ciudad Juárez, el doble del contingente que actualmente se encuentra en esa localidad. Los militares que se mantengan en la zona se encargarán únicamente del patrullaje en los alrededores, aeropuertos y pasos fronterizos.
En los dos últimos años unas 5.000 personas han sido asesinadas en hechos violentos promovidos por bandas del crimen organizado que mantienen una lucha radical por tomar el control de la ruta de la droga que es vendida en Estados Unidos, el principal mercado mundial de la cocaína.
El presidente mexicano, Felipe Calderón, ordenó en marzo de 2009 el despliegue de unos 5.000 militares en esta ciudad fronteriza con Estados Unidos en un intento por contener la violencia, pero sin obtener los resultados deseados porque en 2009 fueron ejecutadas unas 2.700 personas y se multiplicaron las denuncias de abusos por parte de uniformados.
Pese a esta situación, Rosas Rosas ha asegurado que los grupos de la delincuencia organizada no han podido avanzar en los últimos meses debido a las disputas que mantienen por el control del llamado 'narcomenudeo' los cárteles de Sinaloa y Juárez, éste último conocido como el grupo la 'Línea'. "No ha habido derrota, no hay un avance de ellos", indicó.
El Gobierno espera que con estas acciones, enmarcadas en la Operación Coordinada Chihuahua, puedan dar respuestas a las demandas de más de 1,4 millones de personas que viven Ciudad Juárez, considerada una de las localidades más peligrosas del mundo.
Calderón apuesta por el éxito de este nuevo operativo para poner un freno a la violencia que en sus más de tres años de gestión se ha cobrado la vida de casi 20.000 personas en hechos ocurridos en los estados mexicanos donde el narcotráfico ha logrado instaurar un estado paralelo.