Actualizado 14/12/2011 07:20

México.- El gobernador de Guerrero destituye a tres altos cargos estatales por los disturbios en Chilpancingo


MÉXICO DF, 14 Dic. (EUROPA PRESS) -

El gobernador del estado mexicano de Guerrero (suroeste), Ángel Aguirre, ha destituido al procurador, el secretario y el subsecretario de Seguridad Pública, Alberto López Rosas, Ramón Almonte Borjas y Romón Arreola, respectivamente, por la muerte de dos personas durante los enfrentamientos de ayer entre estudiantes y policías en Chilpancingo.

Según informa el diario 'El Universal', el nuevo procurador será Alejandro Fernández Paz y Fuentes; el nuevo secretario, Humberto Calvo, hasta ahora subsecretario de Protección Civil; y el nuevo subsecretario, Leonardo Vázquez, hasta ahora coordinador de la Policía de Acapulco.

Aguirre ha tomado la decisión después de ver una grabación de una cámara de seguridad que recoge el enfrentamiento de ayer entre estudiantes de la Norma Rural de Ayotzinapa y policías estatales y federales en los alrededores de una gasolinera del sur de Chilpancingo, que se saldaron con dos muertos, 15 heridos y 23 detenidos, que ya han sido liberados.

El vídeo, de siete minutos de duración, confirma que los agentes se encontraban en la calle de la que proceden las balas que mataron a los dos estudiantes, así como que llevaban armas largas con las que realizaron disparos, que lanzaron granadas y que golpearon a los manifestantes que se entregaron con las manos en alto.

En declaraciones a 'Milenio', el portavoz de la Policía Federal, José Ramón Salinas, ha informado de que, según el informe de balística, la bala que mató a uno de los estudiantes procede del lugar donde estaban los policías.

"La bala que mató a este joven viene de la calle René Juárez Cisneros, donde estaban apostados los policías. Incluso en el muro de contención de la autopista se demuestra que los impactos fueron hechos por un costado, desde donde estaban disparando los policías", ha explicado.

Así, Salinas ha señalado que la Procuraduría General de la República y la Unidad de Asuntos Internos de la Policía están investigando a los agentes por un posible delito de uso excesivo de la fuerza física, aunque todavía hay que determinar qué policías realizaron los disparos, porque los uniformes de los estatales y los federales son muy parecidos.